miércoles, 29 de noviembre de 2023

Esbozo gramsciano

URD, PARTIDO HISTÓRICO: EL DEL 30 DE NOVIEMBRE

Luis Barragán

Unión Republicana Democrática (URD), nació el 10 de diciembre de 1945, pero su fecha magna y por siempre celebrada fue la del 30 de noviembre de 1952, cuando gana contundentemente las elecciones para la Asamblea Nacional Constituyente. Desconocido el triunfo, perfeccionando así el golpe militar, los líderes de la entidad partidista fueron convocados por el ministro de Relaciones Interiores y, a las pocas horas, expulsados del país: a la dirección del partido la largaron en un avión especialmente fletado para tal fin.

Percatándonos de la fecha, creemos oportuno reflexionar brevemente sobre los partidos históricos a propósito de URD, porque realmente lo fue,  liberal a la venezolana, o de “centro-izquierda de neta concepción liberal”, como señaló Manuel Vicente Magallanes en su clásico “Los partidos políticos en la evolución histórica venezolana” [Ediciones Centauro, Caracas, 1983. 429]. Referido en muchas oportunidades, aunque Jóvito Villalba no lo fundó y tampoco estuvo en su equipo fundacional, a nadie le cabe la menor duda que desempeñó el liderazgo indiscutible de la organización hasta sus últimos días.

Una medida probablemente fiable de la importancia de un líder u organización, la ilustra una tendencia a la imitación por los más destacados comediantes televisivos. El sobresaliente actor de Radio Rochela,  José Antonio Gutiérrez, por cierto, comprometido secretamente en los remotos sesenta con la insurrección armada [http://rosogrimau.blogspot.com/2014/09/], apodado “El Telaraña”, gracias a un personaje que lo hizo famoso, imitó en numerosas ocasiones a Villalba de acuerdo a la prensa de la época.

URD fue un partido de vieja data que se hizo convincentemente histórico por el papel que jugó en nuestra contemporaneidad, el apoyo popular con el que contó y los roles de Estado que asumió. La primera constatación que hacemos es que fue partido, como propiamente pocos lo son hoy en nuestro país, y, siguiendo a un autor como Antonio Gramsci,  que expresó la suma de un elemento difuso, hombres comunes de participación leal que alguien centraliza, organiza y disciplina, aunado a un elemento principal de cohesión que está en el ámbito nacional, ambos debidamente articulados por líderes o capitanes que son tales.   

CONSISTENCIA Y DEBILIDAD

Prominente referencia desde finales de los años veinte, Villalba,  medinista fuera del medinismo derrocado en 1945, logró su inmediata reinserción política a través de URD, cuyos fundadores fueron casi inadvertidamente desplazados de la dirección en etapas tan difíciles como la de la dictadura perezjimenista y la del restablecimiento de la democracia representativa (Elías Toro, Isaac J. Pardo,  Andrés Germán Otero, entre otros).  El partido ostentó un importante caudal electoral [Jesús Sanoja Hernández: “Historia electoral de Venezuela (1810-1998)”, Los Libros de El Nacional, Caracas, 1998], como ahora pocos imaginan; tuvo un enorme arraigo popular en todo el país, siendo decisivo en importantes metrópolis; participó en importantes alianzas que de tradujo en sendas actuaciones ministeriales (Puntofijo y Ancha Base), contando con un descollante elenco parlamentario minimizado en las postrimerías de los setenta.

Partido de una mayor consistencia urbana, con una interesante más que importante penetración en el medio rural, contó con notables referencias como Mario Briceño Iragorry, Luis Hernández Solís, Dionisio López Orihuela, Andrés Germán Otero, Lola de Fuenmayor, Víctor Raffali, Humberto Bártoli, Raúl Díaz Legorburu, J. M. Domínguez Chacín, Manuel López Rivas, Alfredo Tarre Murzi, entre otros que luego mencionaremos, transitados varios momentos de una indiscutible crisis interna. Valga acotar a las nuevas generaciones, demostrado en el curso del presente siglo, nada fácil es conformar un equipo estable y creador de trabajo, además, numeroso, que vaya más allá del despliegue carismático del principal promotor de la organización y de sus circunstancias.

Acierta Gramsci al manifestar: “Un grupo social puede y hasta tiene que ser dirigente ya antes de conquistar el poder gubernativo (ésta es una de las condiciones principales para la conquista del poder); luego, cuando ejerce el poder y aunque lo tenga firmemente en sus manos, se hace dominante, pero tiene que seguir siendo también dirigente” [Antonio Gramsci: “Antología” (selección, traducción y notas de Manuel Sacristán), Siglo XXI Editores, México, 1978: 486]. Ergo, por una parte, valga la constatación sociológica, con su propia militancia, URD tuvo la capacidad de constituirse en gobierno, al igual que otros partidos con los que compitió, como no ha podido organización alguna hacerlo  en la última década y media del presente siglo; y, por otra, no dejó de ser partido-dirigente con el ejercicio de varias carteras ministeriales hasta que lo zarandeó definitivamente el bipartidismo hacia 1973, única solución para el archipiélago de partidos y personalidades que arriesgaron la gobernabilidad en el inmediato período post-perezjimenista.

La creciente debilidad de la entidad partidista posiblemente partió con la desaparición de Vanguardia Juvenil Urredista de un calibre que se aproximaba un poco al de la Juventud Revolucionaria Copeyana; la juventud de Acción Democrática, tempranamente dividida, y la Juventud Comunista de Venezuela. En el caso de los amarillos, color corporativo de URD que alguna vez fue marrón, se vio afectada por la lucha armada, ejemplificado por la conversión al maoísmo de Victor José Ochoa, el secretario juvenil nacional.  Por cierto, una particularidad ya olvidada, en una sociedad extremadamente machista, hubo partidos que exponían y daban altas responsabilidades políticas a mujeres de valía,  e Ismedia de Villalba y Vidalina Ramos [véase, la bien construida crónica de Milagros Socorro: https://elarchivo.org/vida-la-llamaban],  así lo prueba.

FALTARON LOS CAPITANES PARA MANTENER AL PARTIDO HISTÓRICO

Por muy poderosa que fuese la atracción gravitacional del liderazgo de Villalba (parecido al de Rómulo Betancourt, Rafael Caldera, Arturo Uslar Pietri que no, Gustavo Machado), era inevitable que URD contase con figuras de muy alto relieve, voceros de extraordinaria prestancia, y legítimamente competitivos en el seno del partido. Puede decirse, era el deber y clave de toda organización con una seria y comprobadísima vocación de poder, yendo muchísimo más allá del partido-espectáculo como modelo, solamente aventajado en sus movilizaciones de acceder total o parcialmente al erario público, como ocurre con el promedio actual de las entidades oficialistas, opositoras y sincréticas.

Villalba aparte, Enrique Betancourt y Galíndez, despuntó como uno de los diputados más locuaces y consistentes de los años sesenta, aunque otros – encandilados por el proceso cubano – desertaron con una asombrosa candidez, como Fabricio Ojeda, o trabajaron sistemáticamente para una opción ideológica que resultó muy distinta, como José Vicente Rangel y José Herrera Oropeza. Acusado de conspirador, a Luis Miquilena lo hicieron preso en 1964 para luego – en libertad -  retirarse de la actividad política a la que regresó insospechadamente exitoso  tres décadas después, y, antes, Ignacio Luis Arcaya dejó la cancillería de Betancourt, al defender al gobierno de La Habana, determinando la salida de la coalición puntofijista de gobierno para el partido amarillo, regresando a la llamada Ancha Base poco después, manejándose el partido con un evidente desacierto táctico en los eventos electorales posteriores que mermó su caudal de votos y lo hizo un socio indeciso y desconfiable en la izquierda con la que trató de desarrollar una política frentista.

El caso más conocido de un cisma partidista que no llegó a consumarse fue el de Alirio Ugarte Pelayo, cuyo suicidio asombró al país y, al mismo tiempo, generó un movimiento que logró colar posteriormente a uno que otro diputado o concejal, añadida su viuda. Ya en los ochenta no llegaron lejos las desavenencias con Leonardo Montiel Ortega, experto petrolero, conocido como el senador rebelde, quien no logró reelegirse siquiera; y, en las postrimerías de la década, fallece Villalba y veinte años más tarde su viuda, Ismenia de Villalba, la candidata presidencial de URD para 1988.

De no recordar mal, Ramón Tenorio Sifontes es el último diputado de URD, por lo menos, respecto al plantel de los dirigentes más rankeados, que no votó para condenar políticamente a Carlos Andrés Pérez al plantearse en el Congreso de la República el caso del Sierra Nevada, como hizo también José Vicente Rangel.  En todo caso, aunque URD no repitiera la votación que alcanzó con Wolfgang Larrazábal en 1958, mantuvo un piso mínimo y, los más importante, a los líderes capaces de sostener a la entidad partiendo del precepto gramsciano: “Se habla de capitanes sin ejército, pero en realidad es más fácil formar un ejército que formar capitanes” [Gramsci, 1978: 348]. Por consiguiente, faltaron los dirigentes formados, curtidos y experimentados para sostener al partido del 30 de noviembre de 1952.

EL PARTIDO ANTIHISTÓRICO

Lejos estamos de emitir algún juicio de valor en torno a quienes intentaron reflotar a URD en el presente siglo, cuya etapa antihistórica se evidenció por no contar con los mínimos elementos existenciales que hacen a un partido, como la militancia, la estructura, la organización, el mensaje, la estrategia. Si fuere el caso, ha faltado considerar si traduce y expresa a un determinado grupo social al agotar sus funciones en el marco de un bloque histórico que ya se desintegró [Gramsci, 1978: 488], propio de los esplendores del rentismo petrolero que está materialmente acabado.

Cierto, vivimos una transformación de la institucionalidad partidista que tiende a menoscabar o eliminar, precisamente, su naturaleza o carácter institucional, cónsono con el modelo de partido – en definitiva – presupuestario, forzado desde las más altas esferas del Estado que intenta así administrar las inevitables diferencias de sus camarillas.  Refirió el sardo que hay una propensión a “creer que lo que hoy existe ha existido siempre” [Antonio Gramsci, “El ¨Risorgimento¨”, Granica Editor, Buenos Aires, 1974: 67], tendiendo a confundir la noción misma de partido histórico, o, lo que es peor, sin que haga uso de la nomenclatura,  haciendo pasar por tal a los que pecan largamente de antihistóricos, oportunistas y desean hacerse partícipes del presupuesto público.

Por muchas diferencias políticas e ideológicas que tengamos con URD y con Gramsci mismo, es necesario recordar a los amarillos e invocar el prototipo ya olvidado de organización combativa, plural, sustentable y democrática que representó en el concierto de los partidos de la era democrático-representativa que luce muy superior a lo que hoy tenemos. Y es que tampoco un prototipo inmaculado, resaltamos con el autor italiano “… la paradoja de los que están perfectos y formados cuando no existen, o sea, cuando su existencia se ha hecho históricamente inútil” [Gramsci, 1978: 147].

Aparente pleonasmo, es nuestra la convicción de aquellos partidos que han sido  de tal vocación política e histórica y de un profundo arraigo social, como URD, que tardan en desparecer por veinte o más años, o que no toman consciencia de su desaparición, fugazmente aprovechados por aquellos a los que les falta un discurso y desean tomar los atajos que puede dispensar la nostalgia de los viejos tiempos. A lo mejor  sea pertinente concluir, parafraseando un segmento del discurso de despedida del general Douglas MacArthur ante el Congreso estadounidense, que los partidos históricos nunca mueren: sólo se desvanecen.

Composición gráfica: LB, con dos piezas de Jóvito Villalba, tomadas de la revista Élite, Caracas, 09/11/1963.

30/11/2023:

https://opinionynoticias.com/opinionhistoria/40391-urd-partido-historico-el-del-30-de-noviembre

Mar de leva

LA CLASE MEDIA NAVEGA HOY POR LOS MARES INNOMINADOS DE LA MISERIA

Luis Barragán

Nos creemos de preferencias equilibradas, por lo menos, entre la montaña y el mar, o las extensas llanuras y selvas. Inadvertidamente, en las últimas semanas, nos ha llamado la atención la conformación actual de los barcos diseñados para el turismo de puertos al tropezar casualmente con la notabilísima promoción en la prensa extranjera, privilegiado el Mediterráneo por el más seguro.

Adecuada la estación para tales incursiones, nos impresionan las embarcaciones que soportan altísimos centro comerciales que en nada abonan a la conocidísima filmografía, añadidos viejos seriales televisivos. Trátese del Titanic y otros vehículos en desgracia, o los de un anecdotario de feliz conclusión, quedan muy atrás las unidades de una o más chimeneas que tienen por único deleite disfrutar del mar con una orquesta y un barman de fondo.

Las naves de ahora impresionan por la mole de un complejo de servicios e de una incansable recreación antes impensable, camarotes tan confortables como las habitaciones de la mejor hotelería de tierra firme, piscinas singulares, espectáculos de los más variados y otras distracciones, por supuesto, añadido el juego de envite y azar, que reducen a una mera curiosidad la visita a  a proa para apreciar cercanamente el golpe de oleaje.  Posiblemente no se requieran al cumplir con un itinerario de garantizado recorrido,  pero habrá dispositivos ingeniosos y ocultos para afrontar un eventual ataque de piratas que los ingenieros más que los arquitectos navales radicalmente sinceran para los tanqueros y otros navío de transportación de mercancías.

El venezolano tuvo por afición navegar el Caribe en los tiempos del esplendor petrolero del siglo anterior, largamente más democrático el reparto de compararlo con el presente, siendo propicia cualquier celebración. Empero, más allá del cumpleaños, el fin de curso o el disfrute nupcial, lo más importante estuvo en superar el tedio vacacional y aprovechar las ofertas tramitadas por una aventajada caja de ahorros, o dejarse tentar por un específico crédito bancario.

Promediada, ahora,  la clase media venezolana tiene por prioridad sobrevivir en el curso del socialismo que implícitamente condena los viajes de placer, u otros legítimos placeres, aunque sus corruptos han ido mucho más lejos en cuanto a despilfarros, lujos y ostentaciones.  Para alguien que sólo ha navegado en peñeros, como el que nos llevó por el río Cuyuni justo diez años atrás, no imagina cuan complicado será la construcción de un crucero, apto para una densa población flotante, y la existencia misma y producción de los astilleros tan especializados como aquellos que se dedican a fabricar sendas máquinas para la guerra.

Fotografía:  Tomada de la red. 

29/11/23:

https://guayoyoenletras.net/2023/11/29/la-clase-media-navega-hoy-por-los-mares-innominados-de-la-miseria/

lunes, 27 de noviembre de 2023

Discurso y contradiscurso

MAJADERÍA DE LA PAZ IRRISORIA

Luis Barragán

Sesenta años atrás,  al país lo anegó una violencia inaudita e injustificable. La rápida y eficaz construcción  de un imaginario social hazañoso y romántico desprendido de la llamada revolución cubana, propio de la guerra fría en toda su peligrosa y muy atómica plenitud con la consabida crisis de los cohetes,  dificultaba una respuesta contundente del gobierno de entonces. Y, no obstante, la dio con la convicción y el coraje necesarios, camino a una convincente pacificación que un poco más tarde reincorporó a los insurrectos a la vida republicana.

Intensificadas las acciones de octubre-noviembre de 1960 de una autoría y responsabilidad negada ante la opinión pública y el foro parlamentario,   después las redoblaron entre octubre-noviembre de 1963, alzada la izquierda marxista nada más y nada menos que en armas, respaldada y financiada por la dictadura habanera.  Esta vez, decidieron el sabotaje masivo de las elecciones generales de principios de diciembre, plagando de tachuelas la ciudad capital y con un literal como regular ametrallamiento público que también tuvo un saldo de muertos y heridos, por no mencionar los consabidos sucesos e inevitables efectos de El Encanto.

Las ediciones de El Nacional de aquellos días, dieron cuenta de los disturbios y del sorpresivo e indiscriminado tiroteo de hora y tanto por la céntrica y concurridísima esquina de Miracielos, replicados en otros lugares de Caracas y de las principales ciudades del país (https://lbarragan.blogspot.com/2013/04/las-otras-elecciones-luis-barragan-un.html).  Un sesudo reportaje de Víctor Manuel Reinoso para la revista Élite (Caracas, N°  1992 del 30/11/63),  daba también cuenta de los numerosos actos subversivos desarrollados que incluyó la curiosa caravana fúnebre supuestamente orientada hacia el Cementerio General del Sur, portadora de un ataúd sin cadáver.

Jamás ha ocurrido algo equivalente en el curso de los eventos plebiscitarios del presente siglo,  pero el régimen exhibe a la oposición – subrayemos – desarmada, como expresión de una ilimitada violencia, heredera de los lejanos y  represivos gobiernos democrático-representativos que el ardid publicitario los convierte en muy cercanos e inescrupulosos.  Todavía tan rentable aquél imaginario, aún huérfanos de un eficiente y unitario contradiscurso opositor, actualizado y sustentable,  luego de los comicios primarios, las víctimas devienen victimarias por el morbo de una fácil conversión propagandística.

Hay más de majadería y extorsión en la promoción de una paz que el poder establecido acepta sólo como circunstancial e irrisoria, exponiéndose como garante frente a la guerra civil y, ahora, la internacional que jura haber atajado y ataja a propósito del lenguaje empleado respecto a Guyana.   Autoridad moral alguna tienen los socialistas de esta hora, obligada la oposición al desarrollo de una discursividad para la genuina, justísima y duradera paz reclamada por la Venezuela que sufre de la violencia dentro y fuera,  explícita y también implícita a juzgar por el fallecimiento de una honesta e inocente familia que inhaló el gas doméstico carente del olor característico y preventivo de muy antes, mientras dormía; valga acotar, diciendo y mucho,  la madre era ejecutiva de SenosAyuda, una institución voluntaria al servicio de las demás.

28/11/2023:

https://www.elnacional.com/opinion/majaderia-de-la-paz-irrisoria/ 

domingo, 26 de noviembre de 2023

Gusanos de hierro colado

DE LA CIUDAD MINADA

Luis Barragán

Para nadie secreto, nuestras grandes metrópolis son las del deterioro.  Quizá porque constituye todo un modelo de negocios, cada cierto tiempo se impone la necesidad de las remodelaciones parciales, aunque ya no existen los recursos, los inmensos recursos que dilapidó el socialismo en este siglo con la más importante y generosa de las bonanzas petroleros que ha tenido Venezuela.

La ciudad capital, como el resto del país, está sembrada de escombros. Agreguemos: excesivamente de peligrosos escombros que pueden perjudicar y perjudican a cualquier viandante.

Los hay visibles y abultados que jamás recogen, como las viejas casetas telefónicas hechas de una aleación en nada apetecida por las mafias que le robaron todo el aluminio y el cobre a la urbe, teniendo por espontáneos y explotados agentes a los más menesterosos.  Empero, los hay diminutos y prácticamente invisibles que son el resultado infame de la caída de los grandes y medianos postes para la luz y los semáforos, el soporte de sendos avisos de tránsito y de publicidad,  los barandales y otros artilugios para la circulación que alguna vez se quiso ordenada de personas y vehículos.

Jamás repuestas, olímpicamente olvidadas, ocurre que las piezas derribadas principalmente por la falta de mantenimiento, dejan un temible rastro. Las casetas quebradas, nos convierten en herederos de una pequeña caja oxidada llena de cables deshilachados, pero el legado más temible es el de los postes desprendidos que riegan el pavimento de tornillos, trozos afilados de columnas y vigas, trenzados cables cicatrizados quizá por un golpe repentino de amperios, en los lugares más concurridos.

Cual siembra de minas que son la pesadilla de todo escenario real de guerra, como ha ocurrido con el suscrito, la miniatura de chatarra es responsable de estrepitosas caídas de transeúntes sorprendidos y, aunque no tenemos noticia de alguna muerte provocada, es de suponer el incremento de la consulta y emergencia con traumatólogos y fisioterapeutas para quienes pueden pagarlos; por cierto, en un número superior al de otros tiempos, como a principios de 1979 que llamó la atención de la prensa, por entonces, libre (https://apuntaje.blogspot.com/2023/08/noticiero-retrospectivo_27.html). De modo que nadie, por decir lo menos, absolutamente nadie responde por los lesionados, indiferentes las autoridades públicas que tratan de convencernos de la radical normalidad del fenómeno y sus víctimas por sorteo.

Fotografías: LB (Caracas, 5 y 16/10/23). 

27/11/2023:

https://opinionynoticias.com/opinionnacional/40369-de-la-ciudad-minada

La flexibilidad de los cubiertos

DE LA POLÍTICA Y SUS COMENSALES

Guido Sosola

La última edición de El País Semanal, nos distrae con un breve y anónimo reportaje en torno a los restaurantes concurridos por la élite política en París, Brasilia, Washington DC, Londres y Barcelona, ventajosos por su discreción y también publicitación para las más variadas decisiones adoptadas sobre sus manteles (Madrid, n° 2461 del 26/11/23). Obviamente, en nada cuenta Venezuela que tuvo grandes comedores propicios para la negociación.

En efecto, parece que hay una inevitable relación entre la gastronomía y la política, pues, ésta tiene por fundamento el habla, diálogo, intercambio, acuerdo y desacuerdo que, por el constante ejercicio, puede convertir al dirigente en un eximio gourmet. Incluso, aún en dictadura, indispensable un mínimo acuerdo entre quienes ostentan el poder, luce recomendable prolongar y disfrutar en lo posible una conversación que no permite un café o la descompone prontamente una libación de licores.

En nuestro país hubo insignes lugares para el tenedor de los cuales queda una reducida muestra en el área metropolitana, garantizada una adecuada distancia entre las mesas por lógicas razones.  Por ejemplo, quizá más bebedero que comedero, el hoy extinto Shorthorn Gril (antes Tic-Tac de Chacao), en la avenida Libertador, igualmente fue referente para algo más que una tertulia y, nada casual, exhibía fotografías de sendos líderes políticos que lo frecuentaron, aunque mis amigos preferían el Mon Petit Chat del Centro Comercial Altamira Sur, por cierto, antes de que llegaran para cantar los hermanos Planchart para evitar que las estrofas confundieran la acalorada discusión, como aquella de la caída de Salvador Allende y la necesidad de contactar al embajador Orlando Tovar para dar con el paradero de Pastor Heydra en Santiago, si mal no recuerdo.

Hubo sitios de pasos para acordar una conversación más larga, como el Rex, en el edificio Disconti, cercano al Capitolio Federal y a los tribunales concentrados en el centro histórico de la Caracas. Ahí pudo comprar y pagar Luis Herrera Campíns, con su sueldo de parlamentario, una oficina, a modo de ilustración, siendo natural saludarlo, aunque hubiesen diferencias, como a otros connotados parlamentarios, jueces, litigantes; acotemos, no olvidemos la todavía sobreviviente y ampliada Casa de los Espaguetis y sus manchados.

Hasta pagar una taza de café y agua, o en vaso de plástico y botella, cuesta una fortuna, porque hacer política también lo cuesta por muy austeros que seamos.  Y, como fue costumbre en los años sesenta del siglo veinte, hoy ya no es posible invitar a comer en casa, ora porque la nevera está vacía, ora porque es un santuario estrictamente familiar.

Gráfica: https://www.elcorteingles.es/empresas/tienda/product/ayudasdinmicascuchillotenedorycucharaorientables/sanidad14007002400020/

27/11/2023:

https://www.lapatilla.com/2023/11/27/guido-sosola-de-la-politica-y-sus-comensales/

Referentes:

https://apuntaje.blogspot.com/2023/11/paladar-y-decision.html

https://www.facebook.com/groups/586879391415561/posts/2100337040069781/

Paladar y decisión



EL PAÍS SEMANAL, Madrid, n° 2461 del 28/11/2023.

Deslave


EL MUNDO, 26/11/2023. 

Desafío

 A GUYANA CON CARIÑO

Ibsen Martínez 

Borges exaltó hace casi un siglo las excelencias del Religio Medici (La religión de un médico) de Sir Thomas Browne  (1605-1682), hombre controversial que fue  muy perseguido por su humanista heterodoxia.

El crítico italiano Mario Praz, gran erudito en literatura  inglesa, erige a Browne como “uno de los Santos Padres del ensayo moderno, detrás de Montaigne: uno de los primeros en explorar la desconocida  región del yo cotidiano. La religión de un médico es un libro único”.

Por mi parte, no habría dado nunca con Sir Thomas de no ser por un escritor guyanés que, siendo embajador de su país en Venezuela cuando aquel apenas comenzaba a ser una nación independiente, dictó en Caracas, allá por 1970, un breve ciclo de conferencias sobre autores británicos.

El embajador se llamaba Edward Ricardo Braithwaite, expiloto de la Real Fuerza Aérea británica durante la Segunda Guerra Mundial y doctor en Física por la Universidad de Cambridge. El embajador Braithwaite fue autor, también, de una exitosísima novela autobiográfica: Al maestro con cariño (To Sir, with love). Llevada al cine en 1967, Sidney Poitier encarnó en ella al embajador Braithwaite en su experiencia como profesor de una secundaria en el barrio londinense de Stepney, durante los años sesenta del siglo pasado.

El inopinado interés de Maduro por la centenaria disputa fronteriza con Guyana y el empeño que ha puesto  en convocar un referéndum me han hecho recordar las tardes del embajador Braithwaite. Sus conferencias, patrocinadas por el British Council, fueron más bien charlas en petit comité que tenían lugar en una terraza de San Román que miraba al valle de Caracas.

Los padres de Braithwaite eran ambos egresados de Oxford y pertenecían a la clase media afroguyanesa. Pudieron mandarlo al City College de Nueva York de donde, en 1940, el embajador se alistó en la Real Fuerza Aérea. Como piloto de Spitfires voló muchas misiones sobre el teatro europeo. Recordaba con afecto la camaradería de su unidad y afirmó siempre que entre aquellos pilotos casi exclusivamente blancos jamás se sintió discriminado. Las cosas cambiaron por completo al terminar la guerra.

Aunque Braithwaite ganó un doctorado en Física por la Universidad de Cambridge, anduvo desempleado los primeros años de posguerra. Acudió a una veintena de concursos para suplir plazas de docencia universitaria. Quedaban siempre en llamarlo y luego nada: el problema era su color, desde luego.

Amargamente desalentado, un día se hallaba sentado en el banco de un parque y entabló conversación con un anciano londinense muy simpático que escuchó su lamento y lo encaminó a una carrera como profesor de escuela secundaria. Sus experiencias en un barrio pobre del este de Londres nutrieron la novela que en 1959, a los 47 años, le trajo repentina fama. Allí comenzó una brillante carrera humanitaria.

A comienzos de los años sesenta, Braithwaite acumulaba ya una gran experiencia como funcionario de Servicios Sociales en el Reino Unido. La Federación Mundial de Veteranos de Guerra, que agrupa hoy a más de 60 millones  de personas, lo nombró en 1968 alto consejero en Derechos Humanos. En esto, independiente ya Guyana desde 1966, su país destacó a Braithwaite ante la Unesco y luego, como embajador especial en Venezuela. Las cosas no andaban bien entre ambos países.

El año anterior, una rebelión armada de separatistas guyaneses debió replegarse hasta una base militar venezolana en donde solicitaron asilo. Esto ocurría  poco después de que Caracas denunciase el fraudulento laudo arbitral de París que en 1899 despojó a Venezuela de la tres cuartas partes del actual territorio guyanés. Georgetown acusó a Caracas de provocación belicista.

En 1970, los gobiernos del Reino Unido, Guyana y Venezuela suscribieron en Puerto España, Trinidad, un protocolo que suspendía las reclamaciones venezolanas durante 12 años. Nadie en círculos diplomáticos puso entonces en duda que el prestigio y la capacidad de persuasión de Braithwaite fueron fundamentales en el acuerdo que preservó la paz entre Venezuela y Guyana.

De las antiguas colonias británicas en América, Guyana llegó a ser, a fines del siglo pasado, una de las más pobres. Desde 2015, cuando se registró el hallazgo de grandes reservas submarinas de petróleo, el país de 800.000 habitantes va camino a ser el cuarto productor mundial de petróleo obtenido mar adentro, por delante de Qatar, Estados Unidos, México y Noruega. Su ingreso fiscal hasta la fecha rebasa los 1.600 millones de dólares.

Es comprensible que la camarilla cleptómana de Nicolás Maduro, que ha convertido la otrora rica Venezuela en un erial donde campea una pobreza y puesto al país detrás de Haití, quiera reanimar la reclamación territorial acusando a Guyana de subastar yacimientos que según Caracas se hallan en las áreas marinas en reclamación y no le pertenecen. Maduro ha convocado un referéndum consultivo para dentro de tres semanas.

Las preguntas que hace el referéndum son marrulleras, confusionistas y chantajean al electorado con patriotera retórica antiimperialista. Todo ello a pesar de que, en la década pasada Hugo Chávez desistió, paladinamente, con argumentos igualmente antiimperialistas, de echar adelante la disputa limítrofe. Llegó a proponer el desarrollo conjunto de la zona en reclamación.

La oposición partidista, característicamente, titubea ante un referéndum inoportuno y emponzoñado, una bravuconada de clara inspiración militarista que torpemente busca “unificar” a la población propalando una conspiración de la ExxonMobil y el gobierno de Georgetown. No oculta la codicia que lo mueve. Por  sobre todo, es insidiosamente inicuo: no es lícito absorber –ocupar—unilateralmente una zona aún en litigo.

Uno se pregunta quién podrá hoy en Guyana saudita ver ventaja alguna en hacerse ciudadano del petroestado más fallido del mundo cuyos gobernantes han volatilizado un  millón de millones de dólares en un cuarto de  siglo y se hallan imputados en masa ante la Corte Penal de La Haya por crímenes de lesa humanidad. La oposición venezolana, característicamente, titubea ante un referéndum extemporáneo, una bravuconada militarista que no oculta la codicia que lo mueve. ¿Temen los timoratos políticos venezolanos que llamar a la abstención en el marrullero referéndum pueda enajenarles el voto de quienes aún quedan en el país?

Ciertamente, la abstención no ha sido buena idea en el pasado. Sin embargo, llamar a responder “No” a las cinco emponzoñadas preguntas de Maduro no sería  abstenerse sino un desafío que bien vale la pena lanzar a la dictadura en la antesala de una reelección presidencial que Maduro, cada día más forzado a medirse con María Corina Machado, no debería ganar. Con lo que vuelvo a nuestro admirable embajador Braithwaite.

Poco después de firmado el protocolo de Puerto España dejó el servicio diplomático y, ahora sí, se dedicó a la academia. Enseñó literatura en New York University y en la reputada Universidad de Howard, en Washington D.C., hasta su muerte en 2016, a los 104 años.

26/11/2023:

Caza de citas

"- Bien. Qué hay de un susto de embarazo en la adolescencia, quejas de la policía sobre delitos con grafitis, alcohol, drogas, lo de teñiros el pelo de verde, malas notas en la escuela, música estrepitosa en la calle, llegar a casa a las dos de la madrugada, orinar en un lugar público…  

Cuanto más larga se hacía la lista, más reían las hermanas.

Se aferraron entre sí.

–¡Lo hice detrás de un arbusto!

–Wir wollten einfach nur Spass haben!"

Ian McEwan

("Lecciones",  Editorial Anagrama, Barcelona, 2023: 438)

Ilustración: Franck Gerard.

Noticiero retrospectivo

- Ontología del poder. Últimas Noticias, Caracas, 21/11/2000. Suplemento Cultural.

- Miyó Vestrini. "Isaac Chocrón ordeña sus cincuenta vacas gordas". El Diario de Caracas, 22/01/1982.

- R. J. Lovera de Sola. "Alejo Carpentier en Venezuela". El Nacional, Caracas, 17/10/77.

- Federico Alvarez. "Tribuna abierta: El socialismo en discusión.  Esos cambios asustan". Tribuna Popular, Caracas, 22/02/90. 

- Guillermo Meneses y las patotas. El Nacional, 03/06/66.

Reproducción: Carlos Raúl Villanueva, por RAS. El Nacional, Caracas,  09/02/1961.

Justísimo reconocimiento

VIRGINIA BETANCOURT VALVERDE

Luis Barragán

Motivo de una profunda satisfacción,  la Universidad Pedagógica Experimental Libertador (UPEL) le ha otorgado el doctorado honoris causa a Virginia Betancourt Valverde.  Hablamos de una venezolana de excepción que ha sido la primerísima responsable de haber sembrado de bibliotecas a todo el país, definiendo e implementando una política de Estado como ya no se tiene en el curso del presente siglo.

Constituye una buena noticia, en medio de las actuales y difíciles circunstancias para un país que se resiste frente al poder establecido. Ella constituye un ejemplo de probidad, persistencia y devoción a Venezuela,  intransigente a la hora de defender y promover la libertad y la democracia.

Por lo pronto, permítanos dos rápidas aproximaciones: por una parte, desde la creación del Banco del Libro hasta la del Instituto Autónomo Biblioteca Nacional, Virginia demostró cuán comprometido, eficaz y eficiente puede ser el servicio público en el marco de un Estado Constitucional. Toda la infraestructura bibliotecaria sobreviviente en el país, la deben a una gestión profesional y convincente, añadida la sede principal, el Foro Libertador de Caracas, que jamás fue inmueble de partido alguno, con servicios múltiples que le dieron también alcance a los sectores populares.

De su magnífica trayectoria, da cuenta una obra publicada en México bajo la responsabilidad de Estela Morales Campos y Johan Pirela Morillo de título elocuente: “Forjadores e impulsores de la Bibliotecología latinoamericana: Venezuela” (UNAM, 2020: 29-32) [*]. Además de reivindicar la bibliotecología y la archivología, ahora, creídas completamente inútiles al compás del engañoso desarrollo tecnológico, Virginia equipó al Estado de una calificado e inigualable capital humano que le garantizaba la continuidad y profundización de una política pública ya inexistente.

Corajudamente, a contracorriente de aquel país de las iniciales bonanzas petroleras que ayudaron a  sembrar los antivalores para llegar a las consabidas orillas del siglo XXI, Virginia agigantó sus labores. Y es que, por otra parte, hija de  quien fuese presidente de la República en dos ocasiones, vive en Venezuela y comparte las mismas estrecheces de la contundente mayoría de los venezolanos.

El dato es importante y necesario, porque luce inconcebible a la luz del socialismo del siglo XXI que los herederos de quienes ejercen o han ejercido altas o medianas funciones de Estado, no tengan aviones privados y vastas propiedades en el extranjero, y no usen una vestimenta y vehículos de marcas y modelos recientes, sin que a nadie le den explicación alguna.  Ella sigue dando un inmenso testimonio de austeridad y de compromiso cívico, pendiente del legado histórico y documental que le reconocen propios y extraños a Rómulo Betancourt.

En una época en la que no sobran precisamente muchos, las nuevas generaciones tienen un ejemplo a descubrir y seguir: Virginia Betancourt Valverde. Y vaya nuestra salutación para ella, Iván Castro y toda la familia, por el  reconocimiento que la UPEL justísimamente ha hecho.

[*]        https://ru.iibi.unam.mx/jspui/bitstream/IIBI_UNAM/9/4/forjadores_venezuela..pdf.

26/11/2023:

https://www.lapatilla.com/2023/11/26/luis-barragan-virginia-betancourt-valverde/

sábado, 25 de noviembre de 2023

Actitud religiosa, actitud vital

BASTA CON SALIR AL ENCUENTRO DEL HERMANO QUE TE NECESITA

Mt 25, 31-46

Fray Marcos (Rodríguez)

Estamos en el último domingo del año litúrgico, y nos vemos obligados a luchar en dos frentes: La fiesta de “Cristo Rey del Universo” y el 34 domingo del tiempo ordinario, con la lectura de la parábola del juicio final. Los dos temas son extremadamente complicados.

El contexto de la implantación de esta fiesta, nos puede dar una buena pista para interpretar hoy su significado. Fue establecida por Pío XI en 1925, en un momento en que la Iglesia estaba perdiendo poder, prestigio e influencia en la sociedad occidental. La jerarquía seguía oponiéndose a la modernidad y soñaba aún con una “restauración”. Creyó que una fiesta de Cristo Rey ayudaría a recuperar el terreno perdido.

Es la Iglesia la que tiene que descubrir los valores de la modernidad. Son  sobre todo la autonomía y la libertad del ser humano los que tienen que obligarla a planteamientos más de acuerdo con el evangelio y en definitiva más humanos, como veremos al analizar el evangelio de hoy. 

Pero resulta que Jesús nunca reivindicó ningún reino para sí, todo lo contrario, dijo expresamente que, “el que quiera ser primero, sea el servidor”. Afirmó de palabra y con su vida, que él “no venía a ser servido, sino a servir”.

Después del ayuno en el desierto, el ser dueño y señor del mundo se le presenta como una tentación. ¿No hemos ocupado el lugar del tentador, cuando, sin pedirle consentimien­to, le hemos dado todos los reinos del mundo?

Jesús criticó todo poder que supusiera cualquier clase de esclavitud o sometimiento de los demás. Después de la multiplicación de los panes, Nos dice Juan: "Viendo Jesús que querían echarle mano para proclamarle rey, se retiró a la montaña él sólo."

¿No hemos ocupado el lugar de los soldados de pretorio en su burla macabra, poniéndole una corona de oro y un cetro cargado de brillan­tes? O no he entendido nada del evangelio o este cetro y esta corona es mucho más denigrante para Jesús, que la caña y las espinas.

Cuando Pilato pone el título sobre la cruz, "Éste es el rey de los judíos", lo hace para burlarse de él y de los judíos. ¿No será también una burla llamarle rey del universo?

La liturgia de este día está encabezada con esta frase: "Jesucristo, Rey del Universo"; pero las lecturas terminan hablando de un pastor. ¿Podéis imagina­ros dos figuras más contradictorias? Ahí está la clave. El evangelio nos dice que el que quiera entrar en el Reino, no tiene que portarse como vasallo de un superior, sino como servidor de los más débiles.

Sin duda, el Reino de Dios fue la principal preocupación de Jesús en su predicación. La imagen de Dios como rey de Israel se remonta a la época de la entrada en Palestina del pueblo judío. Para un nómada nada podía significar la idea de un rey; pero cuando entran en contacto con las estructuras sociales de la gente que vivía en ciudades, los mismos judíos piden a Dios un rey. Esto fue interpretado por los profetas, como una traición. Desde entonces se va enriqueciendo esa idea y termina por ser la imagen clave para toda la apocalíptica. El final de la historia será un Reino de Dios que termina por sobreponerse a todos los demás.

Sólo en este contexto cultural podemos entender la predicación de Jesús sobre el Reino de Dios. Sin embargo, el contenido que le da es muy distinto. En tiempo de Jesús, el futuro reino de Dios se entendía como una victoria del pueblo judío sobre los gentiles y una victoria de los buenos sobre los malos. Jesús predica un Reino de Dios, del que van a quedar excluidos lo que se creían buenos y van a entrar las prostitu­tas, los pecadores, los marginados... Los gentiles están llamados y muchos judíos quedarán fuera.

Pero la característica fundamental del Reino predicado por Jesús es que ya está aquí. No hay que esperar a un tiempo escatológico, sino que ha comenzado ya. Además, matiza  tanto la idea de un reino externo que queda absolutamente minimizado. "No se dirá está aquí o está allá porque mirad el reino de Dios está dentro de vosotros”.

Para mí, esta idea desbarata todo el montaje anterior sobre el reino de Dios. No se trata de preparar un reino para Dios, se trata de un reino que es Dios. Cuando decimos “reina la paz”, no estamos hablando de un reino, sino de una presencia generalizada. Se trata de hacer presente a Dios entre nosotros, con nuestra manera de actuar, pero después de haber descubierto la presencia de Dios en lo más hondo de nuestro corazón.

Es un reinado del AMOR. No es un reino de personas físicas, sino de actitudes vitales. Cuando me acerco al que me necesita preocupándome por él, hago presente el Reino de Dios y cuando me preocupo de mí, pisoteando a los demás, excluyo de mi entorno el Reino de Dios.

Cuando Pilato le pregunta si es rey, contesta Jesús: “mi reino no es de este mundo”. Al insistir Pilato, le dice: "sí, soy rey, yo para esto he venido al mundo, para ser testigo de la verdad."

Esta frase, desconcer­tante a primera vista, es reveladora. Ser testigo de la verdad, ser auténtico, ser verdad, es la única manera de ser dueño de sí mismo, y por la tanto de ser dueño de la realidad entera. Jesús es rey de sí mismo y así es Rey en absoluto. Siendo verdad, alcanza la plenitud de humanidad y manifiesta el Reino de Dios.

El Reino de Dios, lo divino que hay en nosotros, es como una fuerza, un fermento, un alma, una luz que transforma la realidad concreta de mi ser y se manifiesta fuera en toda la realidad. Se manifiesta como una cualidad, pero en realidad, es la esencia de mi ser. Yo tengo que esforzarme por hacerla surgir desde lo hondo de mí mismo, aceptando que viene a absorberme.

Es necesario que tras haber cooperado con todas mis fuerzas a hacerla brotar, consienta en la comunión, en la que mi propia individualidad se hundirá, y acepte convertirme en su alimento (Teilhard de Chardin). Mi yo tiene que desaparecer para que permanezca sólo la luz que antes me atravesaba. Consumición será igual a consuma­ción.

Viniendo al evangelio de hoy. Después de haber hablado para su comunidad durante muchos capítulos, Mateo amplía ese marco y habla para todas las naciones. Los judíos creían que Dios les aceptaría a ellos y rechazaría a los paganos. Mateo hace otro planteamiento muy distinto: pertenecen al Reino todos los que se han preocupado de los débiles.

El Reino ‘que es Dios’ se hace plenamente presente cada vez que un ser humano actúa desde su verdadero ser. Lo hizo presente Jesús y lo hizo presente Teresa de Calcuta. Que el Reino se haga presente aquí y ahora, depende exclusivamente de ti. Ni siquiera es imprescindible reconocer a Cristo, basta salir al encuentro del hermano que te necesita. Todo ser humano que haya desplegado su verdadera humanidad, hace presente el Reino. Lo único que se tiene en cuenta a la hora de valorar a un ser humano es su humanidad.

Esta parábola no necesita ninguna explicación. Sólo tener en cuenta que se trata de un lenguaje escatológico que no podemos entender literalmente. Nos habla de un común denominador para todos los que quieran pertenecer al Reino.

Fijaos bien, que en esas exigencias no aparece, ni por asomo, connotación alguna religiosa. La pertenencia o no al Reino, no depende de una actitud religiosa, sino de una actitud vital con relación a los débiles. Lo único que se nos pide es la preocupación por el otro.

Es una pena que lo escuchemos como quien oye llover. No se nos preguntará si estoy bautizado, si he ido a misa, si he confesado, si he comulgado, si he creído todos los dogmas, etc. Aquello a lo que nosotros damos tanta importancia, Dios no le da ninguna. El servicio al otro, que es lo importante, no queremos descubrirlo, porque nos obligaría a vivir de otra manera.

En esta parábola podemos encontrar la clave de la encarnación. Dios no se hace un hombre, sino que se hace hombre. El que juzga es el Hombre, el punto de contraste para valorar una vida humana es la similitud con Jesús “el Hombre”. No tenemos que esperar ningún juicio que se me imponga desde fuera. Mis actitudes van manifestando en cada momento el grado de identificación con el modelo de Hombre. En la medida que me identifique con el modelo, me salvo; en la medida que me separe de él, me voy condenando. No esperes a ser juzgado en un hipotético último día. Este evangelio te está juzgando ahora.

No se trata de esperar que Dios me recompense. La clave para salir de la dinámica de toma y daca con relación a Dios, está en que lo que hacemos con los hambrientos no es más que la manifestación de que hemos descubierto y hecho nuestro el Reino que es Dios. No llegamos al Reino por hacer esto o dejar de hacer aquello, sino que nos inclinamos al necesitado porque hemos llegado al Reino. No es lo que hagas por Dios lo que te va a salvar. No nos hagamos ilusiones: si no te preocupas del otro, no estás en el Reino.

Hemos conseguido un cristianismo cómodo colocando a Dios en el cielo. Sería demasiado peligroso descubrir a Dios encarnado en cada uno de los seres humanos que nos rodean. Pero no hay escapatoria. Dios es encarnación y lo tenemos que descubrir en las criaturas. “Cada vez que lo hicisteis con uno de estos mis humildes hermanos, conmigo lo hicisteis”.

La pregunta de los rechazados deja bien claro que, si hubieran descubierto la presencia de Dios en el necesitado, lo hubieran socorrido.

Meditación-contemplación

A la tarde, te examinarán en el amor, dice S. Juan de la Cruz.

Ama y haz lo que quieras, dice S. Agustín.

Naturalmente, se trata del amor manifestado en obras.

No con relación a Dios, sino con relación al que te necesita.

…………………

El amor no es una exigencia que me viene de fuera.

No es una obligación que me impone un ser superior y extraño.

Es la exigencia primera y más profunda de mí ser.

La esencia de mi humanidad consiste en desplegar esa capacidad de amar.

………………..

El amor que nos pide Jesús en el evangelio

es fruto de una experiencia de unidad y pertenencia absoluta.

Sin esa vivencia interior, sería una programación inútil.

El amor es el agua que fluye de la fuente espontáneamente, mansamente.

Ilustración: https://de.freepik.com/fotos-premium/jesus-christus-oelgemaelde-poster-generative-ki_43343256.htm

Fuente:

https://www.feadulta.com/anterior/Ev-mt-25-31-46-MR.htm

Padre Peraza: https://www.facebook.com/arperaza/videos/282040508129102/

Cardenal Porras:  https://www.youtube.com/watch?v=p1358vvk9Ns

viernes, 24 de noviembre de 2023

Preliminares para un referéndum

NELSON PIÑERO

Luis Barragán

El tuitero es un leal militante de la causa ciudadana por la libertad, cuya concurridísima cuenta digital ha sido tribuna confiable para la denuncia de una realidad inocultable. Y, con absoluta responsabilidad, ha ejercido la denuncia y las apreciaciones que le merecen. No obstante, siendo muchos los desafueros denunciados, Nelson Piñero es el que queda preso.

El delito es el de señalar y opinar lo que está a la vista de todos, urgido el régimen de callarlo. Impotente, no lo han contra-argumentado. Contrariados, los servicios de seguridad en el estado Carabobo, simplemente, se lo llevaron detenido y, ahora, se ha decidido que quedará tras las rejas.

Adscrito a Encuentro Ciudadano, valga destacar, inmediatamente la presidente de la organización – Delsa Solórzano - se movilizó hasta la citada entidad federal, resteada, diligente, consciente de sus responsabilidades.  Un partido de DD. HH., presidido por una cabal defensora en las materia, no ha abandonado, no abandona ni abandonará a nadie en tamaño trance, como Nelson o cualesquiera otros ciudadanos afectados.

A las puertas del consabido referéndum, se da el suceso.  Y es inevitable establecer la relación, porque es indicio seguro de una consulta en medio de las invariables circunstancias de una dictadura.

#LiberenANelson, pobló ayer las redes literalmente ciudadanas al producirse la medida.   Inspira la lucha emprendida por la libertad en Venezuela, la que debe derivar en un triunfo inevitablemente unitario para 2024.

24/11/2023:

https://www.lapatilla.com/2023/11/24/luis-barragan-nelson-pinero/

jueves, 23 de noviembre de 2023

Brevísima instrucción para un tesista ocioso

DEL IMPERCEPTIBLE ENVEJECIMIENTO DEL PARQUE AUTOMOTOR

Luis Barragán

Una reciente nota de La Patilla trata de  las penurias de la industria automovilística en Venezuela, la cual no sobrevivió a las promesas rimbombantes de Chávez Frías. Ciertamente, entristece que tal situación ocurra, sobre todo en el país en el que fue relativamente fácil adquirir un confortable vehículo a crédito o de contado, de agencia o segunda mano.

Importa reconocerlo, todavía tendemos a burlarnos de las escenas cubanas que exhiben la aparatosa y escasísima circulación de carros antiquísimos, sin entender el modelo económico que condujo a semejante situación. Nadie entendería hoy una de las últimas novelas de John Dos Passos de finales de los cincuenta del veinte, en la que describe el denso tráfico automotor de La Habana de entonces.

Por alguna rara ilusión, automovilísticamente todavía nos creemos al día con marcas y modelos de la más variados, aunque reconocemos la exposición de carros demasiado excéntricos, lujosos y costosísimos reservados únicamente a una superminoría, a una extravagante minoría por supuestísimo que enchufada con el régimen. Hay quienes están orgullosos de sus camionetas de alguna antiguedad, o de la posibilidad misma de repararlas para configurar una suerte de estatus social muy antes impensable.

Solemos no percatarnos del envejecimiento de nuestro parque automotor, obviando que el promedio de las unidades que circulan en autopistas, avenidas y calles, cuentan con cinco, diez o más años de envejecimiento. Para quien no trabaja con su carro, obteniendo dividendo de su propio tránsito, por el precio de la gasolina y el mantenimiento mismo de la unidad, arriesga y ahorra más por el uso del transporte público, desde un autobús hasta un taxi de las múltiples aplicaciones digitales que se extienden.

Algún tesista ocioso, podría trabajar el tema, incluso, fotografiando estacionamientos de casas y, fundamentalmente, edificios para saber del tamaño más exacto de la crisis que afecta a la otrora veleidosa clase media. O quizá conversando con un experto en la industria, como Roberto Prado, cuya conversación de tres o cuatro años atrás, lo recordamos, necesitamos actualizar.

Fotografía: Oriana Trujillo (tomada de la red).

24/09/2023:

https://www.lapatilla.com/2023/09/24/luis-barragan-del-imperceptible-envejecimiento-del-parque-automotor/

La originalidad de la inteligencia artificial

EL PAÍS SEMANA, Madrid, 08/10/2023.

miércoles, 22 de noviembre de 2023

Abanderado

JOSÉ GREGORIO POP

Luis Barragán

Un par de semanas atrás, presenciamos una obra inspirada en una selección suscritas por José Gregorio Hernández.  Al aceptar la invitación hecha por amigos muy queridos, como Soraya Gross y Néstor Riera, volvimos al Teatro Nacional sorprendidos por las rejas que ahora caracterizan a la Iglesia de Santa Teresa, dando pista de los peligros que aumentaron en sus inmediaciones.

Loable idea la de representar al médico que está camino a la santidad, la concurrencia recibió a los artistas con grandes aplausos. Por lo demás, algo natural con la escasez de obras teatrales y musicales, excepto aquellos muy encarecidos espectáculos con cotizadas figuras extranjeras que ameritan de un mayor esfuerzo comercial y encanto oficialista.

Un popurrí de las más disímiles canciones que encuentran su mejor pretexto en los párrafos de las distintas misivas del médico de los pobres, libreto o apuntador para quienes únicamente cantaron los viejos éxitos, retan al numeroso elenco siguiendo la pista de fondo. Por lo menos, en esta oportunidad, salvo dos de las cantantes más llamativas, unos desafinaron más que otros, incluyendo al protagonista que lidió sin mucho éxito con “Granada” de Agustín Lara, por ejemplo.

Quizá al estrenarse la obra por el mes de agosto del presente año, hubo alguna folletería con información general y técnica, pero ahora no fue posible obtener mayor noticia, sino a través de los portales oficiales u oficiosos  (https://ultimasnoticias.com.ve/noticias/chevere/musical-las-cartas-jose-gregorio-regresa-al-teatro-nacional/). Remodelado el teatro, respiramos las limitaciones económicas de una obra que aparentemente pudiera lucir bien producida por el mobiliario, los adornos, o detalles como el del viejo reclinatorio: empero, la escenografía inconmovible, no dió mucho trabajo a los utileros que, al fin y al cabo, suponemos, emplearon lo que consiguieron en los depósitos, en consonancia con la ausente política cultural del Estado partidizado y holgadamente burocratizado.

Interesante la representación que hacen del trujillano que canta, aunque danza muy poco, con o sin saco, empuñando el maletín médico y el estetoscopio.  “New York, New York”, otro ejemplo, es la mundanal pieza que pudiera escandalizar al feligrés más conservador, pero – a estas alturas de la vida – resulta imposible, al remitirnos a la ya vieja cultura pop de los sesenta del veinte, por lo que concluimos, por una parte, que faltó un poco más de creatividad y de atrevimiento, víctimas los artistas de las caricaturizaciones que son las que se permite un régimen que desconfía de la cultura, negando oportunidades a la libre iniciativa.

Así, entendemos, por otra parte, ciertas licencias que rayan en la cursilería: terminando la presentación con todos los intérpretes en escena, como jamás ella lo hubiese imaginado y aceptado, la Madre María de la Candelaria cubre a José Gregorio Hernández con la bandera nacional, abriendo éste luego los brazos en un sincero gesto populista que, en lo personal, se nos antoja tragicómico.  Las hábiles fotografías tomadas por Soraya que, por cierto, tampoco es responsable con Néstor de lo acá apuntado, rubrican una gesta, la de un homenaje que fuese capaz de llenar con facilidad la sala.

Finalmente, en clave de Sábado Sensacional, o cualesquiera otros maratones televisivos afines, las dos animadoras o presentadoras, con una fotografía del beato en mano, agradecieron no sólo la presencia del cardenal Baltazar Porras, sino pidieron que la audiencia lo aplaudiera de pie en agradecimiento por sus gestiones eclesiales. Imaginamos que al prelado no le quedó más remedio que levantarse para agradecer los aplausos, marchándose – quizá con pena ajena – del sitio lo más rápidamente que pudo, mientras la audiencia hacía algo parecido por los riesgos de las adyacencias.

22/11/2023:

https://guayoyoenletras.net/2023/11/22/jose-gregorio-pop/

Curiosa excepción

EL NACIONAL, Caracas,  09/05/1986. Brevísima nota LB .-  Curiosa la reseña en torno a Mait Delgado, aspirante a Miss Venezuela por entonces....