martes, 6 de mayo de 2025

El batazo de la suerte

ÉTICA Y BÉISBOL

Luis Barragán

Todos foráneos, quienes habitamos el resto del mundo, presumimos que la agenda interna de la presidencia de Estados Unidos prácticamente no existe. Al ocupante de la Casa Blanca solamente lo ocupa algún reconocimiento nacional a conceder, además del nombramiento de su gabinete sujeto a la revisión parlamentaria.  Sin embargo, luce gigantesca la complejidad de los asuntos que directa y simultáneamente le conciernen al interior y al exterior de la superpotencia, la radical variedad de líderes que requieren de su atención, la sensibilidad de los medios de comunicación realmente independientes, la incansable contradicción de los intereses económicos de la más diversa índole, el torrencial de demandas políticas que procesa el sistema y, específicamente, el mismo presidente con las correspondientes tensiones, presiones y pretensiones.

Ahora bien, si comprendemos las extraordinarias dimensiones del béisbol organizado con una rica y fortísima tradición histórica, no es de extrañar una entrevista del poderoso comisionado de las llamadas Grandes Ligas, Rob Manfred,  con Donald Trump, pues, éste tiene por delante de su ventana en cada amanecer, a su propio país. Y es de conjeturar que hubo y hay materias importantes que tratar, además del gesto cortés, aunque The Wall Street Journal (05/05/25) incluyó el caso de Pete Rose, en la aludida conversación, aunque Trump no tiene competencia alguna para resolver algo tan inherente a toda una industria deportiva independiente y de sólidas bases económicas.

Sabido, al mayor hiteador en todo el historial de las mayores se le declaró inelegible para el ambicionado Salón de la Fama, por el vicio persistente de apostar aún a favor de su mismísimo equipo, por lo que no goza de tan exacto reconocimiento. De modo que los familiares de la ya difunta superestrella, han diligenciado el perdón a través de sus abogados, pidiendo levantar la sanción correspondiente y que, no por casualidad, tratándose de un negocio si haber vamos, adquiere una significación y un peso moral muy fuerte.

Ostenta una impresionante relevancia, por una parte, la tenaz sobriedad con la que se maneja la corporación deportiva, desligada las apuestas que, no pocas décadas atrás, contaminó y amenazó seriamente con derrumbar las ligas. Debemos añadir el extremo celo que demuestran en torno al ejercicio de la memoria, por lo que el honor del Salón de la Fama no es nada baladí.

Valga la digresión, y así le insistió el cronista sufragante en un corto video al actor Franklin Virgüez, publicado por Instagram, por muy venezolano que sea, Juan Vené no está de acuerdo con el nombre de Omar Vizquel, postura que ha de respetarse. Admitamos, el gentilicio influye en nuestro ánimo, pero Vené arguye un sentido de responsabilidad que admiramos, excepto alguien pruebe su mala fe.

Por otra, hay una confiable regulación y distribución de poderes en el ámbito privado, porque el comisionado Manfred puede levantar la sanción, pero ello no garantiza el ingreso automático a Cooperstown, sujeto su nombre al Comité de Revisión Histórica para su posterior nominación; y, en el ámbito público, porque el presidente Trump sólo podría indultar a Rose post-mortem por los cargos de evasión fiscal de 1990, carente de toda atribución para intervenir directamente en la corporación. Ha de ser interesante para todo estudiante y curioso del derecho, el seguimiento de la petición formulada por Jeffrey Lenkov, abogado del beisbolista , ahora, de la familia Rose, formulada en enero del presente año para la elegibilidad en cuestión; existen alegatos de interés, como el de la proporcionalidad de la medida, la exaltación del legado frente a una sanción cumplida y que, además, no se ha aplicado a otros jugadores que emplearon esteroides, a modo de ilustración; o, en definitiva, el contraste con los argumentos del abogado John Dowd, quien fue el investigador de Rose en su momento.

Además, el caso ejemplifica una efectiva y eficaz ética deportiva que alecciona al resto de la sociedad, por muy mercantil que se diga la actividad. En beneficio de la confianza, respeto y credibilidad que ha de generar el béisbol al recordar el caso de soborno de los jugadores de los Medias Blancas de Chicago de 1919 y las apuestas en la Serie Mundial de entonces, u otros momentos ingratos de un extenso historial. 

Fotografía: Tomada de la red. 

lunes, 5 de mayo de 2025

Neologismo para una brevísimo contraste

APAGONÍA Y CONJETURACIÓN

Luis Barragán

Los apagones eléctricos, masivos y no tan obviamente sorpresivos al hacerse hábito, pertenecen al terrible y, a la vez, beneficioso género de los problemas difíciles de ocultar por debajo de la alfombra.  Ocurre en las democracias liberales, los funcionarios públicos de una mediana importancia suelen dar explicaciones que los de la más alta jerarquía evaden, incluyendo en este departamento la renuencia de contestar a un llamado parlamentario,  incurriendo en un costo político;  otro tanto pasa con el sector privado de los servicios de energía, aunque la amenaza cierta es la de verse obligado a dirimir finalmente el asunto en los tribunales de justicia por un específico e irreparable daño causado.

El día 28 del mes pasado,  España y Portugal, (des)agregadas algunas regiones,  repentinamente, en cinco minutos, perdieron el 60% de la generación eléctrica, o los ya famosos 15 GW de la inmediata versión oficial madrileña de los hechos que se nos antoja de un afortunado, eficaz y brevísimo razonamiento técnico, por su gran calado popular. Por supuesto, el acontecimiento arrojó importantes consecuencias, siendo muy bajo el número de las personas muertas, negada toda una serie de ciberataques por los organismos de inteligencia, por cierto, inevitablemente ajustada a un imaginario social con los muy fílmicos efectos especiales, en torno a la seguridad y defensa europea frecuentemente cuestionada.

Entre nosotros, la tentación inevitable es la de una igualación del colapso eléctrico de más allá del charco en relación a la experiencia que más acá hemos acumulado, añadidas las fallas, variaciones y el recurrido como forzado racionamiento a horas y deshoras del flujo eléctrico, no por casualidad, en países bajo regímenes decididamente iliberales. Por ello, cabe la distinción entre el sustantivo masculino “apagón” y un neologismo al que nos atrevemos, como el sustantivo femenino “apagonía” referido a un estado, característica o condición de sufrimiento físico o emocional de considerable intensidad atribuido al (in)esperado colapso en cuestión.

Puede constatarse en la gran prensa ibérica, las rápidas y diferentes conjeturas resultantes de un evento tan vasto y, al parecer, sin precedentes históricos, partiendo de la dominante impresión de un “caos total” que, al revés, en este lado del mundo, lució como una formidable demostración de civismo de la población. Valga subrayar, el restablecimiento del servicio en más de 90%, en menos de 24 horas, como un detalle – por estas latitudes –  harto satisfactorio.

Amén del ya emblemático 15 GW, se abre un abanico de causas, como la desconexión de las plantas solares al suroeste español, resaltando los elevados costos de la energía renovable de insumos importados; descartado un súbito fenómeno atmosférico, algo semejante ocurre con un posible sabotaje digital. Sin embargo, suficiente y revelador contraste con el consabido caso venezolano, el modelo perfectible, fruto de la difícil y añeja transición, incentiva, permite y asume como un deber irrenunciable el de las investigaciones de carácter gubernamental (ministerio para la Transición Ecológica, constitución de un grupo de seguimiento binacional, Comisión Europea), judicial (averiguación de oficio por la Audiencia Nacional), parlamentaria (partidos solicitan explicaciones y auditorías, el jefe del gobierno comparecerá al pleno el venidero 7 de los corrientes), y europeo (Comisaría de Energía de la UE), como la aplicación de medidas adoptadas por diversas municipalidades, agregadas las llamadas de autoprotección.

Demasiado evidente es la existencia de instituciones, procesos y mecanismos para canalizar adecuadamente la apagonía, sumada la libertad de prensa, capaz de mitigar la incertidumbre y auspiciar el más amplio debate de legos y entendidos sobre la materia.  Precisamente, la ausencia de un Estado de Derecho, aumenta el desasosiego, encubre responsabilidades y empeora la prestación de los servicios que sobreviven a duras penas.

En efecto, recordamos nuestro tránsito por la comisión permanente de Administración y Servicios de la Asamblea Nacional, años atrás, donde la otrora mayoría oficialista obstaculizaba e impedía sistemáticamente cualesquiera indagaciones respecto a la interminable crisis eléctrica venezolana con el concurso de muy severos motivos, como la falta de mantenimiento, corrupción, desinversión, disminución del personal calificado, entre otros, siendo el fundamental la estatización de la industria, en un contexto de (auto)censura y bloqueo informativo. De modo que resulta ocioso equiparar lo acaecido en la lejana península escasamente interconectada con el resto del continente, con lo que todavía sucede más cercano al Guri y lo que fue un portentoso complejo hidroeléctrico, símbolo ineludible de progreso.

Collage: LB.

Reproducción: Solicitud promovida y formulada en la comisión permanente de Administración y Servicios Públicos de la Asamblea Nacional (2015).

06/05/2025:

https://www.elnacional.com/opinion/apagonia-y-conjeturacion/

¿Perdonar a Pete Rose?

 The Wall Street Journal, 05/05/2025.

Heroísmo no computado

DE UNA ÉPICA TELEVISIVA DEL QUIRÓFANO

Luis Barragán

De muy niños, recordamos en casa dos celebérrimas series transmitidas en ruda competencia por los otrora principales canales venezolanos de televisión. Relacionadas con la rutina médica y sus emergencias, nuestra audiencia hizo suya el Dr. Kildare y Ben Casey, abnegados y heroicos galenos, como mucho más tarde ocurrió con el Dr. House y Grey's Anatomy de un distinto y muy particular enfoque, ya por canales de suscripción.

De consultar a las redes, encontraremos seguramente otras más actualizadas alternativas propias de una pujante industria del entrenamiento que versa sobre los centros hospitalarios, por cierto, holgadamente equipados y con un personal frecuentemente especializado, decidido y eficaz. Nada difícil imaginar la riqueza de los libretos de tratarse de nuestros hospitales, médicos, enfermeros y camilleros de guerra, claro está, cuando existen en la extensa  geografía nacional.

De un modo u otro, la programación incentiva posibles vocaciones en un ámbito que también exige insólitos sacrificios, e informa de algunos pormenores del ejercicio profesional, por superficial que fuere. Excepto que seamos pacientes y afrontemos la cruda realidad de un servicio público de tan precarias condiciones y recursos, o de otro privado capaz de devorar toda la póliza de seguro para quedar en la calle a los días, igualmente enfermos, poco se sabe de la rigurosa disciplina.

Presumimos que, muy antes, los jóvenes conocían más del asunto, ora, por el relativo funcionamiento y acceso a los servicios de salud; ora, por una básica libertad de prensa que daba cuenta de las fallas e, igualmente, aciertos que entraban legítimamente al debate político, partidista y gremial. En todo caso, por décadas, la medicina fue el óptimo camino hacia un rápido ascenso social, dependiente o no del Estado, que bien lo puede sintetizar el Albertico Limonta, protagonista de una telenovela de profunda penetración en los sectores populares: “El derecho de nacer”.

Nos preguntamos de los actuales incentivos para cursar estudios medios y superiores en materia de salud, incluyendo aquellos orientados a las innovaciones tecnológicas que les son tan indispensables. De surgir la ilusión silvestre de salvar vidas en un quirófano, el aspirante ha de pasar por la dura realidad de aspirar, acceder y sostener el cupo en una acreditada institución educativa, informándose de su propia existencia, circunstancia ésta que ya no es tan común como pudiera pensarse.

En efecto, sentimos que un porcentaje creciente de la población juvenil, por increíble que parezca, acude tardíamente a una consulta médica y sólo por situaciones extremas, pero tampoco ha tenido referencias en torno a un oficio que entraña una gran responsabilidad, convicción y aplomo. Menos, imaginará que existe una épica de la salvación de vidas ajenas, acaso, ¿suponiendo exclusivamente hazañoso el pandillaje?

Quizá, la natural y profusa publicidad de la santidad de José Gregorio Hernández contribuya a  exaltar el heroico ejercicio profesional del médico que realmente también lo fue, avanzado investigador y profesor de nuestra emblemática universidad.  Porque la fe sin obras, es cosa muerta, el trujillano finalmente conjugó una profunda preparación espiritual – precisamente – obrando como un médico confiable y de una extraordinaria formación académica y un eximio desempeño como investigador y docente: Dios actuó a través del médico que fue, mas no del curandero que ha de tentar a los propagandistas del momento.

Reproducciones: John Dugdale / “This series follows Royal Blackburn Hospital’s critical care teams”. The Sunday Times, 20/04/25.

05/05/2025:

domingo, 4 de mayo de 2025

Caza de citas










"Sin embargo, la cumbre de la pereza es, en la misma medida y al mismo tiempo, la cumbre de la vida practica y de la vida sensible: el placer estético. Qué es, entonces, lo que nos brinda, al experimentar la belleza, esa libertad interior incomparable, ese estar más allá de la dureza y la pesadez de las cosas, esa calma y luminosidad del alma, de la que se separa toda animosidad y superficialidad, como las nubes delante del sol en el mediodía estival? "

George Simmel

("Imágenes momentáneas sub specie aeternitates", Gedisa, Barcelona, 2007: 102)

Ilustración: Andjela Janković.

Noticiero retrospectivo

- A. Fernández Martínez. "Del panorama social: Una política parlamentaria". El Universal, Caracas, 12/01/1944.

- Rodolfo Quintero. "Los sindicatos y las candidaturas presidenciales". El Nacional, Caracas, 01/07/58.

- Amenodoro Rangel Lamus. "19 de abril de 1907. Origen de la Sociedad Salón de Lectura". El Nacional, 19/04/67.

- "Falcón y su naturaleza de inconfundible maravilla". Élite, Caracas, N° 1422 del 03/01/53.

- Roque Leal, con fotografía de Molina. "Las amas de casa y el mercado negro de apartamentos" (El "gang" de los traspasos). Momento, Caracas, N° 523 del 24/07/66.

Fotografía: Vista desde uno de los balcones del hotel Majestic, Caracas. Aporte de Jerjes Meléndez al grupo facebookeano Caracas en Retrospectiva.

Una llamada de atención

DEL SUFRAGIO HISTÓRICO

Luis Barragán

Del voto censitario pasamos al universal en el siglo XIX y, además, directo y secreto en el XX. Toda una acrecida conquista histórica que derivó después en la elección de base de las autoridades partidistas y de los principales gremios de una más activa y decidida sociedad civil, excepto los empresariales.

Versamos en torno a una cumplida aspiración ciudadana que, por la particular naturaleza de sus funciones, no tiene alcance para el ámbito eclesiástico y militar, por ejemplo. Empero, no se entiende cualesquiera comunidades sin la debida representación y la libre selección de sus líderes para darle soporte a la participación.

Peor, tampoco se comprende la sola posibilidad de que, en un futuro tan contradictorio con nuestro mejor historial republicano, el sufragio sea de segundo o tercer grado para elegir a los titulares del ejecutivo y legislativo a niveles nacional, regional y municipal, y, faltando poco, se diga y jure como lo más democrático. Esto, inexorablemente, se traducirá en todo el tejido social y, a la postre, trastocado definitivamente en cultura, nos asfixiará.

Lo peor será que, insólito, desconocido el proyecto de una reforma anunciada, el cambio constitucional en la dirección presentida nos retrotraerá a la tesis del gendarme necesario, esta vez, por la vía de una izquierda de vocación estalinista. Las tesis positivistas que tuvieron un antiguo y extraordinario auge entre nosotros, planteándose como las más genuinas del país rural y atrasado que fuimos, nacido de la guerra civil, vuelven a cobrar vigencia en el asombroso contexto de la era post-rentista.

Acotemos, la confusión entre Estado y gobierno, garantizará a su dirección el acceso a los recursos materiales y simbólicos para imponer la pretendida y por siempre prometida participación, sin la menor representatividad de los agentes políticos subordinados.  Cívicamente, faltará el oxígeno que, en principio, concede el libre sufragio directo, secreto, universal y personalizado.

Ilustración: Marcel Carem.

04/05/2025:

https://lapatilla.com/2025/05/04/del-sufragio-historico-por-luis-barragan/

El batazo de la suerte

ÉTICA Y BÉISBOL Luis Barragán Todos foráneos, quienes habitamos el resto del mundo, presumimos que la agenda interna de la presidencia d...