domingo, 2 de noviembre de 2025

Caza de citas

Baum tenía la respiración entrecortada y necesitaba a toda la costa la margarita. Quería volver con Sam, sentarse frente a ella, igual que tantas veces con Tyler, y recuperarse con el tequila. Quería sentirse feliz y triste al mismo tiempo. ¿Triste por qué? Porque también hay cierto placer en la tristeza. ¿Por qué? Porque todo carece de sentido. Su percepción era acertada, no todo en esta vida tiene explicación. Sam esperaba en la mesa, iluminada por la luz cálida y rosada de una lámpara que resultaba tremendamente favorecedora. Estaba con su segunda margarita. Se sentó en la silla y se dio el gusto de contemplar a la chica. La margarita aguardaba allí mismo"

 Woody Allen

(“¿Qué pasa con Baum?”, Alianza Editorial, Madrid, 2025: 117).

Ilustración: Edward Hopper.

Noticiero retrospectivo

- Sanín. “Palco de sombra: Venezuela saudita”. El Nacional, Caracas, 06/06/1978.

- Pedro Zalima. “Socialismo proletario”. Tribuna Popular, Caracas, 04/08/78.

-Wolfgang Larrazábal. “El 23 de enero”. Élite, Caracas, N° 2104 del 22/01/66.

- Juan Monasterios Malavé. “Venezolanos de segunda”. El Aragueño, Maracay, 08/10/90.

- Emeterio Gómez. “La empresa privada en la Unión Soviética”. El Diario de Caracas, 28/08/85.

Reproducción: José Rodríguez Iturbe. Semana, Caracas, 1969.

Supervivencia para un debate en la medida de lo posible

MÍNIMA ESCOLARIDAD

Luis Barragán

Huelga preguntar, ¿quién puede negar el extraordinario progreso de la educación y de la profesión docente en la era del puntofijismo? ¿O, acaso, la alfabetización, el dominio de las operaciones aritméticas básicas y los propios modales de un civismo necesario, no tendieron a dominar en aquella Venezuela ya definitivamente urbana?

En una ocasión, alguien muy indignado tomó un video de los recolectores que recogieron la basura de la calle con una bandera nacional para echarla al camión. Y, aunque la indignación se justificaba y la viralidad resultó en el apresamiento de los humildes y desesperados trabajadores, nadie o muy pocos se detuvieron a pensar no sólo en las precarísimas condiciones con las que realizaban sus labores, sino en la directa exposición a cualesquiera bacterias tan desprovistos de mascarillas, y la segura como temprana desescolarización de quienes no tuvieron oportunidad de asumir la importancia y trascendencia de un símbolo patrio.

Además, no por casualidad, es muy frecuente tropezarse en los espacios públicos y comunes, pues, no todos los transitan por la derecha como una elemental garantía de efectiva circulación, por no mencionar a las personas atravesadas, las que se paran a conversar obstaculizando el paso y, esto, ocurre aún – así no lo crean – en las pistas para el entrenamiento deportivo. Sin lugar a dudas, algo pasó en las aulas de una infancia no tan remota que no enseñó, al menos, con suficiente terquedad para garantizar un mínimo de convivencia.

Nos sorprende cuán lejos llegan los hurtos menores, por decirlo de alguna manera, porque es todo un pendejo aquél que no pueda estirar la mano y quedarse con algo perteneciente a otro, desde un llavero o un par de cambures hasta el chip de un celular que le permita operar una cuenta bancaria ajena. Es nuestra la impresión de una reinante moralina que esconde la cruda realidad de una conducta también perversa, no corregida en el hogar y, a lo sumo, simulada en la escuela.

Viene al espíritu la preocupación con motivo de la  homilía del primer día de los corrientes,  durante la Misa en la Solemnidad de Todos los Santos por el Jubileo del Mundo Educativo en la que León XIV proclamó a san John Henry Newman como Doctor de la Iglesia y copatrono de la educación junto a Santo Tomás de Aquino. Y, específicamente, la Carta Apostólica intitulada “Diseñar nuevos mapas de esperanza” (*), con la cual se puede coincidir y discrepar, pero mal síntoma sería la generalizada indiferencia que suscita su aparición al igual que otras noticias sustanciales desechadas por las miles de falsas conjeturas políticas que se cuelan en el natural debate venezolano.

Nada casual es el incremento de la matrícula escolar en el sector privado que nos permite presumir a pepa de ojo  que hay padres y representantes que no son creyentes, pero procuran una escuela católica o afín para la prole. Hasta donde es posible pagar el colegio, inscriben a los muchachos y se verá después cómo hacer hacer con las mensualidades: así no asistan a las misas dominicales, como es de suponer al tratarse de una institución religiosa (la obligación moral de hacerlo), lo importante es que los muchachos tengan una formación mínima en principios y valores que no da tiempo de dar o es imposible darla en un hogar de sobrevivientes.

El resto de los que no pueden costear la educación de los niños como quisieran, los arriesgan expuestos a los antivalores enmascarados, al aparente aprendizaje de los conocimientos indispensables, a una emocionalidad frágil y cómoda. Prevost marca un rumbo para un debate necesario de legos y entendidos en la medida de lo posible, capaces de proyectar y responder al caso venezolano.

 (*) https://www.vatican.va/content/leo-xiv/es/apost_letters/documents/20251027-disegnare-nuove-mappe.html

02/11/2025:

https://lapatilla.com/2025/11/02/luis-barragan-una-minima-escolaridad/

Ilustración: Kyoung Hwan Kim.

Cfr. Texto de Isabel Pereira Pizani en torno a la educación y el pronunciamiento del papa León XIV: 

https://www.elnacional.com/2025/11/leon-xiv-la-tarea-educativa-en-busqueda-de-verdad-y-de-sentido

sábado, 1 de noviembre de 2025

"... Existe un camino para encontrarse con Dios que no pasa por el templo"

EL "JUICIO UNIVERSAL" ES AHORA

(San Mateo, 25: 31-46)

Enrique Martínez Lozano

La parábola del "juicio universal" no pretende ofrecernos una visión anticipada de un imaginado "final del mundo", como algunos predicadores nos hicieron creer, recreando una escenografía propia de una película de ficción.

Es una parábola –por tanto, no cabe una lectura literalista- que nos habla del comportamiento adecuado aquí y ahora. Y culmina con una conclusión, que es una llamada a no equivocarnos: "Y estos irán al castigo eterno y los justos a la vida eterna".

El "castigo" o la "vida eterna" (plena) no es obra de un dios exterior, sino el resultado de una determinada manera de vivir, atascada en la ignorancia de quienes somos o, por el contrario, lúcida y despierta.

Es indudable que esa "forma de vida" se halla con frecuencia poderosamente condicionada por factores de diverso tipo: genéticos, ambientales, educacionales, afectivos... Muchos de ellos pueden ser incluso inconscientes para el propio sujeto. Pero todo ello no niega la primera afirmación: nos experimentamos a nosotros mismos según el "modo de vida" que adoptamos.

El criterio decisivo, según Jesús, no pasa por la religión, como quizás esperaría encontrar el lector del evangelio y como se nos hizo creer muchas veces, como cuando se decía: la persona religiosa se "salvará". De este modo, se vino a convertir la religión en salvoconducto para la "vida eterna". Así, la persona religiosa solía adoptar una postura autosatisfecha y no exenta de un cierto sentimiento de superioridad.

Sin embargo, el mensaje de Jesús es completamente claro en este punto: el criterio no es religioso, sino ético. No tiene que ver con creencias mentales, sino con entrañas compasivas.

Además, el corazón compasivo vive la ayuda y el servicio desde la gratuidad. No solo no lo hace para conseguir algo a cambio, sino que ni siquiera tiene una motivación religiosa: "Señor, cuándo te vimos...?". De un modo similar, a quienes, desde una opción religiosa, vivían queriendo agradar al Señor, se les reprocha con dureza no haberlo reconocido en la persona de los más necesitados.

La parábola, por tanto, en un primer nivel de lectura, contiene un mensaje revolucionario y subversivo para el mundo religioso: viene a decir que existe un camino para encontrarse con Dios que no pasa por el templo. Esta es, sin duda, una de las mayores novedades de Jesús.

Pero existe aún otro nivel de lectura más profundo, y que remite a –y se comprende desde- el reconocimiento de la naturaleza no-dual de la realidad. Las separaciones mentales –que luego adoptará también la religión- son meras ficciones que confunden y distraen. Lo cierto es que no existe nada separado de nada. Por eso, "el Señor" –Dios, el núcleo de todo lo que es, la Fuente y el Origen de todo, la Consciencia amorosa...- vive en todos los seres y, si se entiende bien, es todos ellos. Por eso, lo que hacemos a cada uno de ellos, lo estamos haciendo a Dios mismo, que también es nosotros.

Descubrir esto es sabiduría, fuente de liberación, de amor y de ecuanimidad. Su fruto es la plenitud de vida. Ignorarlo, por el contrario, es permanecer encerrados en la ignorancia y, por tanto, en el sufrimiento. Como dijera, hace siglos el poeta y místico Rumi, "el peregrinaje al lugar de los sabios consiste en encontrar cómo escapar de la llama de la separación".

Fuente:

https://www.feadulta.com/es/buscadoravanzado/item/5602-el-juicio-universal-es-ahora.html

Nigeria: https://x.com/patergongora/status/1984979535796854941

Padre S. Martín. Actualidad comentada, ¿Iglesia fiel o liberal?  






Arquidiócesis de Caracas: https://www.youtube.com/watch?v=bbHe5luda0U (**)


Padre S. Martín: https://www.youtube.com/watch?v=f7xvIq07b4Q  (San Juan):




(*) La lectura vaticana hizo mención a san Juan, 6: 37-40, pero hoy comenzó el ciclo de san Mateo en la misa vespertina y como consta en la Hoja Dominical.
(**) De nuevo dejamos nuestro comentario, pues, no dicen quiénes son los oficiantes, etc. 

Caza de citas

“ Baum tenía la respiración entrecortada y necesitaba a toda la costa la margarita. Quería volver con Sam, sentarse frente a ella, igual que...