UN NUEVO TIPO DE RACISMO
Ángel Muñoz Flores
Es muy preocupante por decir lo menos, la actitud que se ha tomado con respecto a un nuevo tipo de racismo, incluso en los países desarrollados. Esto ha ocurrido después de hechos tan condenables como el asesinato de una persona negra a manos de agentes policiales, la sociedad ha respondido con además de la indignación lógica, con una especie de histeria colectiva, que se ha manifestado en grandes grupos de personas pidiendo perdón entre llantos por ser blancas.
Más preocupante es cuando este tipo de histeria trasciende a los ámbitos académicos. Se ha visto no sin asombro en algunos foros a ponentes decir antes de su intervención que de lo que van a conversar tiene lamentablemente una influencia blanca, europea y occidental, es decir, se anatemiza la influencia occidental en el continente americano. Lo extraño es que muchos de estos personajes están influidos por el marxismo y el cristianismo. Nada más blanco europeo y occidental que ambas corrientes de pensamiento. Muchos dirán que el cristianismo proviene de oriente, empero, la versión dominante por razones históricas ha sido la europea.
Es muy probable que quienes mantienen estas posturas lo hagan por ignorancia o por demagogia, incluso por ambas cosas, de todos modos, es una actitud altamente peligrosa porque su desenlace natural es sin duda alguna, el sectarismo y el fundamentalismo tan deletéreos para toda la sociedad. Ciertamente se debe denunciar y condenar los crímenes e injusticias de todo pasado colonial, empero, lo que no debe hacerse es tratar de rescribir la historia, hacerlo es manipulación burda propia de demagogos de toda laya. Muchos de estos falsificadores dicen reivindicar un pasado aborigen que no conocen ni entienden, sólo se aprovechan de él.
Condenar la esclavitud como un modo de producción del pasado es válido, combatir cualquier forma de discriminación del pasado o del presente es necesario, pero renegar de todo legado europeo es un despropósito, si así se hiciera se terminarían aboliendo de la historia a todos nuestros libertadores, que en muchos casos fueron dueños de esclavos, es decir, fueron esclavistas. En sus tiempos así se producía en sus haciendas, no por eso son condenables.
Es alarmante cuando una turba en un acto delirante de estulticia derriba estatuas, o autoridades cambian nombre de autopistas, avenidas y plazas, o cambian escudos. De igual forma cuando se eliminan órdenes honorificas porque supuestamente tienen nombre de conquistadores genocidas, se puede observar el nivel de ignorancia de los que creen que están escribiendo una nueva historia patria y con ello rescatan una dignidad pisoteada en el pasado.
En Venezuela han quitado las estatuas de Cristóbal Colón, tal vez ignoran lo que Miranda y Bolívar pensaban del genovés. Verbigracia Bolívar sostenía: Esta nación se llamaría Colombia como un tributo de justicia y gratitud al creador de nuestro continente, Colombia y no América debería llamarse el continente según Miranda y Bolívar. Allí tienen los españicidas como les llama Mario Vargas Llosa a quienes niegan por necedad el legado español en América y no entienden que somos mestizos y en eso radica la riqueza diversa de nuestro continente.
26/11/2022:
http://opinionynoticias.com/opinionpolitica/38402-un-nuevo-tipo-de-racismo
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