La Misión aparece como el elemento fundamental de los relatos, que es precisamente lo que recoge el Evangelio de Juan en la aparición a los diez. Recordemos la narración de Juan.
sábado, 31 de mayo de 2025
Vocaciones de misión
La Misión aparece como el elemento fundamental de los relatos, que es precisamente lo que recoge el Evangelio de Juan en la aparición a los diez. Recordemos la narración de Juan.
martes, 27 de mayo de 2025
El 22 convencional de mayo
22 DE MAYO
Raúl Fuentes
Hay escribidores capaces de enfrentarse a una página en blanco con el arrojo de un piloto de Fórmula 1 y, en tiempo récord, redactar una página completa de un periódico standard. Según Adriano González León, Carlos González lo hacía con regularidad y espíritu deportivo en Meridiano, periódico de su propiedad (de Carlos, no de Adriano), y también Rodolfo Terragno en los inicios del Diario de Caracas al mando de Diego Arria. Estoy muy lejos de emular semejantes hazañas: acometo el teclado con dos dedos y no siempre tengo encendido el bombillo. A fin de verle el queso a la tostada, suelo valerme de una frase célebre —una «cita citable», la llamaría la centenaria revista Selecciones del Reader’s Digest—, la sinopsis de un cuento o de una película y, la más de las veces, tal he dejado constancia en entregas anteriores, de una efeméride: toda fecha es ocasión para evocar algún evento feliz o una deplorable tragedia, y conmemorar uno de los muchos «días internacionales» dedicados por la Organización de las Naciones Unidas a crear conciencia sobre variados aconteceres, grupos etarios, instituciones (el Día de los Museos fue celebrado el pasado miércoles), y, en general, a diferentes manifestaciones y expresiones del patrimonio material e inmaterial de la humanidad: el plenilunio de mayo (Vesack budista), los vuelos espaciales tripulados, el Novruz (Año Nuevo persa), las remesas, la felicidad y un abultado etcétera.
Mientras definía peso y contenido de la presente travesura, leí sobre el alivio de algunas de las sanciones de Estados Unidos a los regímenes de Cuba y Venezuela, y me sedujo la idea de referirme al impacto de tales concesiones en el reinicio y curso subsiguiente de las negociaciones en suspense, ahora con la vista de los potenciales dialogantes puesta en las elecciones de 2024, ansiadas con inusitada vehemencia hasta por algunos de sus más intransigentes adversarios, víctimas, conjeturo, del «síndrome de estar quemado», al cual alude la psiquiatra y especialista en neuroinmunología y medicina cuántica Rebeca Jiménez (Al venezolano lo han desmontado emocionalmente. El Nacional, 22/09/2021). María Corina, como siempre, dijo ¡no!, y Felipe González, a su modo, la avala: «Uno no puede negociar con la violación sistemática de derechos humanos y los crímenes de lesa humanidad». La merced de Biden apunta a serenar ánimos y aplacar arrogancias, generando un ambiente propicio al contraste de posturas y al logro de acuerdos orientados a solucionar la crisis de gobernanza y el clima de intolerancia imperantes en el país. Ello, alegan opositores contumaces, comporta un tácito reconocimiento del mandato madurista. Acaso sea cierto, pero vamos a dejarnos de pendejadas: quien corta el bacalao en palacio y es tenido como comandante en jefe de la fuerza armada nacional es el bigotón —¡no, las minúsculas no son un error!—. Juan Guaidó, a quien es de justicia reconocer su proyección internacional y su tenacidad, es arte y parte del rifirrafe a ventilarse nuevamente en México y debe necesariamente estar representado en esa conversa, cuya continuidad está en veremos, dado el empeño del loquero Rodríguez en exigir, en nombre de su jefe, la presencia en ella de Alex Saab, condición imposible de satisfacer porque ese sujeto es reo de la justicia norteamericana.
Cuando esto escribo —jueves 18— se cumplen 28 años del encarcelamiento de Carlos Andrés Pérez, acusado de malversación de fondos públicos, mediante una abominable sentencia inducida por la acusación vindicativa de un fiscal rencoroso y el influjo de los denominados «notables» —tal vez porque se hacían notar a diario en los medios de comunicación, sustitutos a su entender de los partidos políticos—, un avispado grupete de ordeñadores de las ubres estatales, auténticos parásitos de una democracia defectuosa, aunque perfectible, sepultada por ellos mismos con el ejercicio interesado de la antipolítica. La fecha es aciaga y digna quizás del adjetivo infame, como el 4 de febrero o el 27 de noviembre; empero, de aquí en adelante volcaremos nuestra atención al 22 de mayo, cuando se recuerdan la fundación, en 1764, de Santo Tomás de la Nueva Guayana de la Angostura del Orinoco, hoy Ciudad Bolívar; y, en 1863, la firma de Tratado de Coche, poniendo fin a la Guerra Federal. Mas, en favor de estas líneas, viene a cuento al remembrar lo acaecido en la Universidad Central de Venezuela, un 22 de mayo, pero del año 1969 y no domingo, sino jueves.
Al día antedicho había transcurrido un año del fallido intento de la juventud francesa de asaltar el cielo e instaurar la imaginación en el poder; sí, hacía un año de la revuelta del Mayo francés de 1968, cuando multitudinarias manifestaciones estudiantiles con adhesión de los trabajadores pusieron en jaque a la V República de Charles de Gaulle y sacudieron las buenas conciencias de la bien pensante sociedad burguesa; un año, sí, pero las imaginativas consignas de los jóvenes parisinos —¡Prohibido prohibir!, ¡Seamos realistas, pidamos lo imposible!— insuflaron en nuestras universidades un gran aliento al movimiento de renovación académica. Recuerdo muy bien aquellas jornadas de acalorados debates e irracionales tomas, cual la de la Dirección de Cultura, pues acababa de entregar mi tesis y, aguardando el acto de graduación —esperé dos años para recibir el título en un acto deleznable bajo la rectoría espuria del ingeniero Oswaldo de Sola, en la torre Lincoln de Sabana Grande—, colaboraba con Jacobo Borges en la producción y dirección de cortos cinematográficos de agitación y propaganda —Cine Urgente llamábamos al colectivo integrado por Pedro Laya, Emilio Ramos, Josefina Jordán, Jacobo y yo—. Con cámaras de 16 milímetros y grabadoras al hombro nos encontrábamos en la Ciudad Universitaria al momento de producirse una violenta trifulca: militantes de la juventud copeyana, envalentonados con el triunfo de Caldera en las elecciones de diciembre del año anterior, organizaron, para consternación del chichero, una marcha hasta el emblemático reloj de la Universidad Central de Venezuela, «en defensa de la pacificación» y, aunque el rector Jesús María Bianco se opuso, los verdes en sus trece porfiaron en llegar hasta donde se habían propuesto; sin embargo, activistas de la ultrazurda y zarrapastrosos pobladores de la Tierra de Nadie, hoy enchufados de alto coturno, decidieron detenerles. El presidente de la FCU, Alexis Adams (†) procuró poner orden en el despelote, a fin de evitar una reyerta de impredecibles consecuencias, pero fue herido gravemente de un balazo en el hígado. Se acusó sin pruebas a Gustavo Tarre Briceño, pero este pudo demostrar su inocencia y al día de hoy la identidad del gatillo alegre sigue siendo una incógnita. Nosotros logramos rodar un buen pietaje de lo acaecido, incluyendo una toma de Alexis al caer por efectos del disparo. Con ese material conseguimos editar un documental (un tanto sesgado ideológicamente) de 40 minutos de duración. En él, lo ocurrido en el campus de la Central es parte de la cadena de percepciones de un individuo pegado a una radio portátil. Cuñas y noticias eran el fundamento de la banda sonora. Y se llamó, lógicamente, 22 de mayo.
El 31 de octubre de 1969, 5 meses y algunos días más tarde de los sucesos narrados, se dio inicio a la «operación Canguro». Por órdenes del presidente Rafael Caldera, 23 tanques de combate, 100 vehículos de usos varios y unos 3.000 efectivos policiales y militares comandados por el general Homero Leal Torres, ingresaron a la Ciudad Universitaria de Caracas y causaron destrozos en el Rectorado, laboratorios, bibliotecas, escuelas, facultades y residencias estudiantiles con saldo de no se sabe con exactitud cuántos muertos, heridos, detenidos y desaparecidos. Se trató del «allanamiento más desproporcionado y brutal de los realizados a la UCV». Caldera, profesor en la Facultad de Derecho de la casa de estudios por él ultrajada, defenestró al rector Jesús María Bianco y reformó a placer la Ley de Universidades, a fin de darle un barniz de legalidad a su política antiautonómica —le hubiese gustado una legión de bachilleres disciplinados al modo de seminaristas y cadetes—. Estas acciones fueron secuela de aquel 22 de mayo de 1969 aquí reseñado. Constituyeron una de las muchas manchas de la democracia, y apuntalaron las incumplidas promesas y el demagógico discurso de Hugo Chávez.
Bertrand Russell era tan jodedor como filósofo. Sustento esta falta de respeto en un alegato suyo según el cual «No hay ninguna imposibilidad lógica en la idea de que el mundo haya aparecido hace cinco minutos, exactamente como está y con una población que ‘recuerde’ un pasado completamente irreal». Pues bien, con base en esa hipótesis lo contado por mí pudo no haber sucedido y ser mero producto de mi imaginación; de igual manera el chavismo y su cola de pajamaduristas serían apenas fugaces alucinaciones; pero, infortunadamente, la tierra de cinco minutos del sabio británico no pasa de ser un «argumento escéptico». La realidad es otra. Alexis Adam fue herido un 22 de mayo hace 53 años, Caldera intervino la UCV y, el 13 de febrero de 1994, le facilitó a Chávez el ascenso a las alturas del poder. Gracias a una indulgencia derivada del rencor o de la envidia, llevamos 23 años aguantando los abusos de una panda de facinerosos, destructora de instituciones, pervertidora de leyes y confiscadora del espacio y el tiempo ciudadanos con un par de claros objetivos: lucrarse y gobernar per sæcula sæculorum. Y mañana, 23 de mayo, Día Mundial de las Tortugas, inicia su andadura la nueva estructura de la Plataforma Unitaria. Ojalá no lo haga al ritmo de los quelonios.
22/05/2022:
Ni tan breve nota LB.- A principios de los años ’80 del ´XX escribimos sobre los hechos del 22, y, desde entonces, no retomamos el tema como siempre aspirábamos en el contexto de una reflexión sobre las juventudes políticas en Venezuela. Fallecido recientemente Elías López, gravitó la importancia del remoto evento y, nos lo confirmó Naudy Suárez, ha tratado de contactar a los sobrevivientes de aquellos hechos para redondear un texto alusivo. A mediados de mayo del presente año, Herrera y Alzurú entrevistaron a Carlos Blanco y, en la primera parte del interviú, dio una versión interesada y, acaso, natural de un actor de la época con la cual no concordamos en sus trazos esenciales, como esto de Segovia como autor del disparo (pues, es la única gráfica fortuitamente tomada a un machista armado desde el suelo), el impedimento mismo a otras fuerzas políticas de entrar a la universidad, o, a tono con el deplorado bipartidismo de siempre, como si lo hubiesen consagrado para la fecha, el acuerdo adecopeyano para legislar sobre la univsersidad. Sin embargo, reconoce que se les fue la mano con la radicalización y provocaron lo ya consabido. Cercana la fecha aniversaria, me animó a escribir sobre el asunto. Después recibí un amable mensaje de Marcos Fuenmayor, anexándome el texto de Raúl Fuentes, a quien he leído con frecuencia. Igualmente comprensible la postura de la hija de Alexis Adam, pero creo que ha de indagar y todos debemos indagar más en torno a aquellos acontecimientos, porque el discurso es de una extrema victimización y acusa recibo de los estigmas, incluso, señalando a NSF. Respeto su postura profundamente, aunque no la comparta. Ya es tiempo que la historia ocupe el terreno al que todavía abona o jura abonar la política. Por cierto, en la era digital, no es fácil obtener una gráfica del suceso en cuestión y, quizá, por ello, El Nacional empleo una gráfica del mayo francés del ´68.
Cfr. https://apuntaje.blogspot.com/2025/05/breve-ensayo-radiografico.html
lunes, 26 de mayo de 2025
Un referente ineludible
LIDERATO POLÍTICO, CHINA Y LAS RELACIONES SINO-VENEZOLANAS
Luis Barragán
Ocupados por
un texto de alguna pretensión académica, nos aproximamos a China para
corroborar una determinada hipótesis de trabajo. Y, nuevamente, nos percatamos de
una decisiva circunstancia: los partidos políticos tienden a desconocer el
extraordinario fenómeno asiático, entendiendo por tales a los que no ejercen o
influyen, ni están supeditados al poder establecido y, mucho menos, se confunden
con el Estado.
Circunstancia
quizá comprensible por las condiciones en las que se desenvuelve la oposición,
contrastante con otras ya remotas que permitieron el desarrollo institucional
de numerosas y estables organizaciones políticas y la multiplicación de sus
voceros, por ejemplo, entre otras, en el área internacional. Ésta supuso también una mayor
vocación de estudio compatible con el desempeño político y la asesoría de los
especialistas – incluso – reacios a toda disciplina partidista.
Hoy, sentimos que es insuficiente la atención política dispensada a la República Popular de China, por muy destacada que fuese en el concierto de las naciones, distinta al ámbito de los intereses estrictamente oficialistas y una - en algo – profusa propaganda de ocasión. Hay un generalizado y grave desconocimiento de la superpotencia, además, puertas adentro, aun tratándose de un actor y - antes - impensable acreedor absolutamente inevitable para la Venezuela futurible que requiere de una impostergable y profunda consideración del liderato político: por una parte, con un sentido de realismo que igualmente ha de explicar las más fuertes convicciones, y, por otra, estimulando y generando las vocerías del caso.
Del arqueo
bibliográfico en línea, nos impresiona el número de acreditados especialistas,
como Minxin Pei, Cui Shoujun, Margaret Myers,
Jonathan D. Spence, Matt Ferchen, Rhys Jenkins, o Evan Ellis, sólo
excepcionalmente traducidos al español; y los latinoamericanos Sergio Cesarin,
Gabriel Merino, Enrique Dussel, Juan
Santarcángelo. Una grata noticia, encontramos una interesante muestra de
autores venezolanos, como Angeyeimar Gil, Jorge Díaz, Norbert Molina-Medina, Aymara
Gerdel, Emiliano Terán Mantovani, o Manuel
Sutherland, aunque – paradójicamente – cuesta un poco más conseguir sus
trabajos.
Lo cierto es
que China y las relaciones sino-venezolanas, reclaman un superior entendimiento
político afianzado por los rigurosos aportes de la academia y sus urgidas libertades
de cátedra, frente a la negligencia, ignorancia y cuidado si subestimación a
pesar del sobrepeso consabido en nuestro presente y futuro. Y, por lejos que nos
encontremos de los principales circuitos geopolíticos, es necesario estudiar al
gigante asiático por las más obvias razones.
27/05/2025:
https://www.elnacional.com/opinion/liderato-politico-china-y-las-relaciones-sino-venezolanas/
domingo, 25 de mayo de 2025
Caza de citas
"Es posible que no salgamos con vida de las ruinas, pero si salimos es en forma de material más depurado. En este sentido, incluso los fracasos políticos más catastróficos pueden tener valor terapéutico. Al fin y al cabo, así es como funciona el fracaso: el veneno de la serpiente es a la vez ponzoña y medicamento"
Costica Bradatan
("Elogio del fracaso", Anagrama, Barcelona, 2025: 61)
Ilustración: Sam Bosma.
sábado, 24 de mayo de 2025
Noticiero retrospectivo
- Orlando Albornoz. "Asamblea en Maracay: La empresa privada discute sus problemas". El Farol, Caracas, N° CLXX 05/57.
- Pronostica Jorge Olavarría que la historia se repetirá con el esequibo en 1982. El Nacional, Carcas, 24/12/81.
- "Detrás del telón: ¿Quiénes hacen el teatro en Venezuela?". El Farol, CXXXI de 1950.
- Salvador Rodríguez. "Peluquero, pionero en Caracas" (1936). El Nacional,01/08/90.
Fotografía: Avenida Urdaneta, a lo lejos se aprecia el edificio Ramia, sede del ministerio de Comunicaciones. Fuente: Caracas en Retrospectiva (Facebook).
De la universalidad del mensaje
LA IGLESIA ES UNA COMUNIDAD DE PECADORES EN CAMINO DE CONVERSIÓN
(San Juan, 14: 23-29)
José Enrique Galarreta
El evangelio es un fragmento del "Sermón de la Cena", el largo testamento de Jesús en la noche del Jueves Santo. En la despedida, Juan coloca en labios de Jesús el resumen final de su mensaje: guardar la Palabra, amar como Dios nos ama, recibir el Espíritu de Jesús, permanecer en la paz.
Juan es capaz de hacer formidables síntesis. Su evangelio es una reflexión final de la fe de los Testigos, y todo en su mensaje se relaciona y se hace un solo mensaje: Dios-amor habla en Jesús y mora en los que aceptan a Jesús: el Espíritu está en ellos: cuando Jesús no está, el Espíritu sí que está, y la Iglesia siente la paz, aun en medio de la ausencia de Jesús y de las persecuciones.
Este es un domingo para renovar nuestra fe en la Iglesia, para profundizar, más allá de lo que vemos y criticamos, para ver en el fondo de la Iglesia la Presencia del Espíritu de Jesús. Es un domingo para avivar nuestra fe en Dios, en Jesús, en la Iglesia y en la Humanidad.
Partamos de la imagen de Juan en el Apocalipsis: el final es el triunfo de Dios. El final de la Iglesia y de la humanidad es "la ciudad perfecta", donde no hay llanto ni muerte, ni hace falta templo ni luces de astros, porque Reina Dios en todos.
Esta visión, sin embargo, es un símbolo limitado, muy material. Ha servido para imaginarnos el cielo como una corte real, todos pasmados en la contemplación de la divinidad. Son símbolos muy externos. La realización humana en Dios no es estar en un lugar sino el resultado final de la conversión. Dios no reina desde fuera y desde arriba, sino desde dentro. El triunfo de la humanidad es la desaparición del pecado y de la condición temporal del hombre, la desaparición de la fe. No podemos dejar que estas imágenes sustituyan a su propio mensaje.
Pero las imágenes nos ofrecen la posibilidad de hacer un acto de fe en el triunfo de Dios, en el destino de la humanidad, en que esta Iglesia que ahora vemos tan manchada está llena de ese Espíritu que allí será una evidencia, una vez superados los pecados de la propia Iglesia.
Porque la Iglesia no es una comunidad de santos. Es una comunidad de pecadores en camino de conversión. Y menos mal que es así: si fuera una comunidad de santos, yo no podría formar parte de ella. Es una comunidad de gente como yo, con pecados como los míos. Y los pecados de todos afean el rostro de la Iglesia y obstaculizan nuestra fe y la de los demás.
Esta es la imagen que nos muestra, con tanta claridad, el libro de los Hechos. Una Iglesia con dudas, tensiones y disputas. No tienen demasiado claros ni siquiera algunos aspectos esenciales de la fe cristiana: hay en ella facciones diferentes, los judaizantes, los helenizantes, los discípulos de diversos maestros.
Pero es una comunidad que se caracteriza por algo sumamente básico: atienden al Espíritu, oran para encontrar la Palabra, y el Espíritu se muestra en la comunidad, superando los intereses y las obcecaciones de cada uno. El Libro de los Hechos debería ser conocido a fondo por todos los cristianos. Es una formidable meditación sobre la Iglesia.
Jesús está hablando a un grupo que necesita aún convertirse a su mensaje. Han entrado en el cenáculo discutiendo sobre quién es el mayor, y han preguntado a Jesús si es ése el momento en que va a instaurar su reino: no se han enterado de nada. Jesús les ha contestado lavándoles los pies. Y Juan coronará el mensaje en su primera carta dejando claro que el amor no es un sentimiento, sino obras, servir a los hermanos. Así - sólo así - se muestra la presencia de Dios, en nosotros y en la Iglesia. Así - sólo así - se muestra que, ahora que Jesús no está, su Espíritu está en la Iglesia.
Es importante el último mensaje: la paz. No es simplemente la tranquilidad, la satisfacción. Es que no tenemos miedo de que Jesús no esté. La Iglesia no depende de los pecados, ni siquiera de los aciertos de los hombres, ni siquiera de sus propios pastores. La Iglesia es obra del Espíritu, y el Espíritu de Jesús está aquí. Y sigue vivo el amor, el servicio, la búsqueda de la Palabra. La Palabra es cada vez más escuchada, el servicio es cada vez más atendido, la Eucaristía es cada vez mejor celebrada: la Iglesia está viva, animada por el Espíritu de Jesús.
CREO EN LA IGLESIA
Creo en Jesús, el hombre lleno del Espíritu,
Morada de Dios entre los hombres.
Creo en el Espíritu de Jesús,
el Espíritu de Dios que en Jesús se hizo visible,
Espíritu que nos hace clamar: "Abbá, Padre".
Creo en la Iglesia,
comunidad de los que creen en Jesús,
que vive de su mismo Espíritu.
Doy gracias a Dios porque en la Iglesia
he conocido a Jesús.
Doy gracias a Dios porque en la Iglesia
escucho y recibo la Palabra,
y experimento el perdón.
Doy gracias a Dios porque en la Iglesia
celebro el recuerdo de Jesús / pan
y comulgo con él
y con todos los hombres mis hermanos.
Y pido a Dios por nosotros, la Iglesia,
para que sea una, santa, universal, apostólica,
para que se deje llevar por el Espíritu,
para que sirva a todos los hombres
y pueda así ser para todos
la Buena Noticia de Jesús.
Fuente:
Ilustración:
Padre S. Martín: León XIV y los cismas a evitar; https://www.youtube.com/watch?v=o2VDoibBQs4
Papa León XIV: https://www.youtube.com/watch?v=usWR700cO7g
Monseñor Biord: https://www.youtube.com/watch?v=q7WyZ6DUZ0Q
Padre Martín: https://www.youtube.com/watch?v=jhYSDMR-lck
Monseñor Munilla: https://www.youtube.com/watch?v=fb7ZrCb-Jos
miércoles, 21 de mayo de 2025
SOS
ISRAEL Y GAZA
Luis Barragán
Desde un
primer instante, fue inequívoco nuestro respaldo a la respuesta israelí frente
al ataque sorpresivo e indiscriminado recibido, añadida la consabida y desenfadada
situación de rehenes. E, incluso, atentos a las cívicas protestas en casa
contra el premier Netanyahu, preocupaba el creciente autoritarismo del
gobierno.
Hay razones válidas
para que el país todavía se defienda, esta vez, atacando, frente a la
confabulación terrorista urdida más allá de sus fronteras. Sin embargo, los
gazatíes deplorablemente empleados como
un inmenso escudo humano por el terrorismo, pagan un elevadísimo costo humano y
material de nefastas e ilimitadas consecuencias, siendo utilizados hasta el
cansancio por Hamas, dándole sustento logístico a los yihadistas.
Costo sobre el
que debe reflexionar el liderazgo israelí por los excesivos daños irreparables
que se traducen en un profundo resentimiento, sólo útil para para la vil
explotación de la dirección terrorista que siempre fue indiferente e
irresponsablemente desafiante de las advertencias de Jerusalén. Huelga
comentar, golpea profundamente en el corazón, la devastación y hambruna de Gaza
que únicamente celebran los enemigos del vecino país; como golpea que ya no
puedan los gazatíes cruzar la frontera para laborar en Israel, inscribirse en
la seguridad social, ser atendidos en los hospitales públicos, ahorrar en los
bancos, comprar víveres y artículos de uso personal … israelíes.
Ha hecho falta
un liderazgo palestino responsable y consecuente, y, ahora, una mayor prudencia
del liderazgo israelí respecto a la administración de su triunfo que no es otro
que el de mantener al país en pie a pesar de las cobardes agresiones cebadas
contra la población civil. Ahora, Israel debe hacerse portador de un
extraordinario y audaz programa de ayuda humanitaria y de comprensión hacia el
gazatí que ha tenido por exclusiva comprensión de las personas, el mundo y las
cosas, la recibida de una dirigencia que hizo caso omiso de las severas
advertencias de Jerusalén.
Gráficas: The Wall Street Journal, 20/05/2025 y Financial Times, 22/05/25.
21/05/2025:
lunes, 19 de mayo de 2025
Breve ensayo radiográfico
EL VENIDERO 22 DE MAYO DE 1969
Luis Barragán
A Elías López Latorre,
in memoriam
Hay hechos que maceran lentamente para adquirir su más genuino sentido hasta hacerse definitivamente históricos, aunque el impacto original haya sido de una distinta significación, como los acaecidos en la Universidad Central de Venezuela (UCV) en las postrimerías de los sesenta del veinte: la izquierda entusiastamente castroguevarista de entonces, que hizo de la casa de estudios su mejor y más segura trinchera con la absoluta aquiescencia del rector Jesús María Bianco, trató de impedir una legítima y masiva marcha de los sectores estudiantiles socialcristianos, repeliéndola con violencia. Nuevamente, forzada la unidad de los militantes de la Juventud Comunista de Venezuela (JCV) y del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) para rivalizar con la acreciente Juventud Revolucionaria Copeyana (JRC), perfilándose la candidatura de Elías López Latorre a la presidencia de la Federación de Centros Universitarios (FCU-UCV), la ocasión fue propicia para profundizar en el aspirado clima de desestabilización del país que evidencia la prensa escrita desde el inicio mismo del primer gobierno de Rafael Caldera, más allá de los muy específicos sucesos locales.
A aquella izquierda la ocupó el presupuesto universitario, haciéndose del poder cultural y, tras el fracaso insurreccional, militarizando el marxismo, tuvo por el mejor aporte a su particular leninismo el de la infiltración de las Fuerzas Armadas a largo plazo que valoró el diputado Héctor Mujica en el debate de la cámara a propósito de las declaraciones emitidas por el general Martín García Villasmil, terminando el agitadísimo año. Y es otra y desacostumbrada la radiografía que ensayamos del 22 de mayo de 1969, la de una suerte de antropología política de bien ganada y densa perspectiva histórica.
20/12/2025:
https://www.elnacional.com/opinion/el-venidero-22-de-mayo-de-1969/
Cfr.
https://apuntaje.blogspot.com/2025/05/el-22-convencional-de-mayo.html
domingo, 18 de mayo de 2025
Asfalto
DE LA AUTOPISTA MOTORIZADA
Luis Barragán
De restringir la
circulación de las motocicletas por la autopista en la gran Caracas, por
ejemplo, el caos citadino sería tan monumental como absolutamente
incomprensible por la más elemental de las razones: ciertamente, todo el parque automotor ha
envejecido demasiado, aunque no lo advirtamos.
Sin embargo, lejos de disminuir, la densidad el tráfico se mantiene y
nada difícil será encontrar los motivos.
Principiando
el presente siglo, los motorizados raudos y veloces volvieron a todas las
autopistas del país para ejercer un señorío que es el del riesgo propio y,
obviamente, el de los demás. Quizá el derecho al libre tránsito fue el
argumento favorito, así nos parezca un disparate, al menos, hasta nuevo aviso,
que el poseedor de un vehículo fórmula 1 pueda emplearlo a su antojo en
cualquier arteria vial.
El arrojado
piloto motorizado ha abierto uno propio entre los canales extremos de la
autopista, el de mayor velocidad y el nada inocente hombrillo, consagrándolo
como un derecho adquirido de acuerdo a los usos y costumbres contra legem, haciendo cada vez menos continental
y más accidental nuestro derecho. Y, extendiendo el privilegio, viaja con toda
la familia a cuestas o hace las mudanzas que el vehículo le permite creyendo el
suyo, un inspirado y cultivado malabarismo.
En el reino de
las velocidades inauditas, el taxista intenta batir el récord personal que le
permita competir con otros colegas por una suma irrisoria que le reporta el
banderazo digital. Porque muy pocos incurren en la locura de pasear la urbe por las noches, no sabemos de la hazaña de los pirueteros en la pista, ni de las apuestas por un pique desahogado de largo
kilometraje que ha de quedar sólo para la tradición oral.
Aceptemos que
el problema de las motocicletas en las autopistas venezolanas igualmente cuenta
con una inevitable dimensión política, tratándose de los bienestares y
malestares comunes. Por cierto, bienestares y malestares completamente
irrenunciables.
Fotografías y video: LB, entre la avenida Páez y Quinta Crespo (CCS, 13/05/2025).
19/05/2025:
https://opinionynoticias.com/opinionpolitica/42912-de-la-autopista-motorizada
Caza de citas
Manuel Arias Maldonado
("Desde las ruinas del futuro. Teoría política de la pandemia", ePub.r1.0, 2020: 210)
Ilustración: Dan Piraro.
Noticiero retrospectivo
- Alejadro Otero."Monocromos". El Nacional, Caracas, 11/03/90.
- Rodolfo José Cárdenas. "El libro de Carlos Rangel". Resumen, Caracas, M° 143 del01/08/76.
- Andrés Jiménez Ollarves y el 57° aniversario de la Orquesta Sinfónica de Venezuela. El Universal, 14/07/87.
- A. J. Moreno Cova. "Ventanas de Venezuela: El viejo Melesio, caudillo y general machetero". El Universal, Caracas, El Universal, 19/04/67.
Reproducción: Fotografía de Grillo: "Los dirigentes de la juventud de COPEI en la UCV, Naudy Suárez y Edgar Palacios (con vendaje en la cara), y otro miembro de la JDC, declaran en la redacción de ´El Nacional'". Acusan al PCV y al MIR de intento de aterrorizar a COPEI en la UCV. El Nacional, Caracas, 27/05/1969. Brevísima nota LB: Silvia Schanely refiere que la persona no identificada en la gráfica, es Rafael Martínez, ya fallecido.
Schmitteanos y ceresoleanos
UNI DAD
Luis
Barragán
Por
supuestísimo, no existe ni aspiramos a una unidad de piedra monolítica en la
oposición. La política irrespirable no es política y, muchísimo menos, política
democrática.
Modestamente,
desde muy temprano, advertimos que, más allá de la retórica de estilo, el
camino era (es y será), el de una constante articulación política con arraigo
social (28/06/22: https://www.elnacional.com/opinion/articulacion-politica-y-arraigo-social/).
No hay alternativa para una oposición diversa e inteligible que se haga capaz
de administrar sus diferencias, detectar e, inmediatamente, sanar ante la
deslealtad, superando las traiciones evidentes, palpables, constantes y
sonantes.
Aprendimos desde nuestra más remota militancia juvenil que la controversia constituía uno de los rasgos fundamentales del quehacer político y, por muy amarga que fuese, profesando valores y principios comunes, frecuentemente las convenciones nacionales u otros eventos internos, zanjaban la polémica; esto es, la apelación al otro y a los otros, expresamente. Empero, salvo contadas excepciones, jamás desavenencia alguna convertía a individuos, grupos y tendencias, en enemigos irreconciliables, y, de hecho, con los años, ha sido una constante el de subsanar antiguos malentendidos y hasta reír de las viejas discordias, entre quienes supimos de aquella escuela irrepetida de civismo.
En
el presente siglo, la noción schmitteana y ceresoleana de enemigo también es una
tentación y una contaminación para las más genuinas filas de la oposición. Y,
subrayemos, en abierta contradicción con el mandato ciudadano más clara y
contundentemente formulado por la ciudadanía: no otro que el de la unidad que
ha de diligenciarse hasta el hastío.
De modo que insistamos en la principalísima y limpísima bandera de la unidad eficaz, continua y perfectible de la oposición democrática. Todo, lejos de la ridícula conversión del desacuerdo político en un asunto absoluta y radicalmente personal, cuando compartimos o decimos compartir principio y valores semejantes.
18/05/2025:
sábado, 17 de mayo de 2025
Admirable sencillez e insistencia en la práctica
EL AMOR GRATUITO, SEÑAL DECISIVA DEL DISCÍPULO DE JESÚS
(San Juan, 13: 31-35)
Enrique Martínez Lozano
Con el capítulo 13, empieza la segunda parte del evangelio de Juan: es el llamado "libro de la Hora". La "hora" de Jesús no es otra que la de su muerte-resurrección, que el cuarto evangelio entiende como la hora de su "glorificación".
Para este evangelio, de acuerdo con sus propias claves, la cruz no es tanto el instrumento de tortura, sino el trono donde, vencido el mal, queda entronizado el amor de Dios manifestado en Jesús: "Tanto amó Dios al mundo que entregó a su propio Hijo" (Juan 3,14). El camino de la cruz es, por tanto y paradójicamente, un camino de glorificación.
Este texto pertenece al llamado "testamento espiritual" o "discurso de despedida" de Jesús, que abarca nada menos que cinco capítulos –del 13 al 17 inclusive-, y que conoció sucesivas redacciones, como puede apreciarse en esta última que ha llegado hasta nosotros.
El término "glorificación" ya había aparecido en el capítulo anterior. Tras una confidencia en la que Jesús muestra su abatimiento, en un texto que es el equivalente joánico a la "oración de Getsemaní" de los sinópticos, se abre al Padre, buscando únicamente su gloria. El texto dice así:
"Me encuentro profundamente abatido; pero, ¿qué es lo que puedo decir?... Padre, glorifica tu nombre. Entonces se oyó esta voz venida del cielo: «Yo lo he glorificado y volveré a glorificarlo»" (12,27-28).
Pareciera como si el autor hubiera unido, en un único texto, la angustia de la "oración del huerto" y la gloria de la transfiguración en el Tabor, en un relato que encierra además una profunda sabiduría psicológica. Al experimentar su fracaso, Jesús se siente oprimido por la angustia. Y únicamente cuando entra por el camino de la aceptación, abandonándose a la voluntad del Padre, reencuentra la paz.
Mientras giramos en torno al yo, no encontramos salida a la angustia. Sólo cuando aceptamos el malestar, sin reducirnos a él, se empieza a hacer la luz. En su "volverse" al Padre, Jesús reencuentra también su verdadera identidad y, con ella, la liberación de los miedos.
Quien está identificado con su yo, vivirá a merced de sus vaivenes; en la medida en que podemos tomar distancia de él, observando los oscilantes contenidos de nuestra mente, no sólo nos haremos dueños de nuestro "diálogo interno", sino que empezaremos a tomar conciencia de nuestra identidad más profunda, aquello que realmente somos, y que no puede verse dañado por nada de lo que nos ocurra.
La glorificación, de la que aquí se habla, no es otra cosa que la manifestación o desvelamiento del misterio divino, en cuanto misterio de amor que se entrega hasta el extremo (evangelio de Juan 13,1). La "gloria" de Dios no es sino su amor. Para el autor del cuarto evangelio, eso se pone de manifiesto en la cruz, que él entiende teológicamente como manifestación suprema de amor.
Si ésa es la gloria de Dios, es totalmente coherente que el "mandato" de Jesús se mueva en la misma dirección: el amor.
La forma como se expresa es rotunda. Frente a los innumerables mandamientos rabínicos, frente incluso al Decálogo de Moisés, las palabras de Jesús suenan tajantes: "Os doy un mandamiento". No hay otro.
La admirable sencillez y la insistencia en la práctica, que caracterizan el mensaje de Jesús, se ponen de manifiesto también en esta síntesis de lo que debe el ser el comportamiento que pide a sus discípulos.
El término "hijos míos", que lo introduce, aparte de expresar un afecto intenso, puede que remita a la costumbre judía del padre que, a punto de morir, transmitía el testamento espiritual a sus hijos. Aquí también, ante la muerte inminente, Jesús comunica lo que considera más valioso, lo que había constituido el eje mismo de su existencia.
Porque, como había ocurrido a lo largo de toda su vida, Jesús va por delante. Antes de decirlo, antes de pedirlo, él lo ha vivido: "como yo os he amado". Pero esa expresión no es comparativa, sino "causal": porque yo os he amado. Tal como pone de relieve X. Léon-Dufour, uno de los mayores especialistas en el estudio de este evangelio, la traducción más ajustada es la siguiente: "Con el mismo amor con que yo os he amado, amaos también los unos a los otros".
Todo arranca, según la teología del cuarto evangelio, del amor del Padre, que se ha manifestado en Jesús y que ahora circulará a través de los discípulos. Se trata del mismo y único Amor, que constituye el secreto último de lo Real. Lo que se pide a los discípulos es que permitan que ese Amor primero y originante se exprese y se viva a través de ellos.
Por eso, no es un mandato heterónomo, venido de fuera, como una imposición arbitraria. Se trata, por el contrario, de una invitación a vivir lo que somos, conectados con el Misterio amoroso de Lo que es, a partir de la Unidad experimentada.
Ello será posible, no tanto a través de un voluntarismo moral, cuanto gracias a la comprensión de lo que somos. En la medida en que vamos conociendo y viviendo lo que somos –recordemos que, cuando se trata del verdadero conocimiento, conocer y ser coinciden-, el amor se abre camino. Identificados con nuestra mente, no podremos estar sino encapsulados en el ego y en sus propios movimientos egocéntricos. La comprensión de nuestra identidad profunda e ilimitada hará posible un modo de vivir caracterizado por la desegocentración.
En el texto se habla de "mandamiento" (en griego, entolé), como queriendo poner de relieve la importancia de lo que ahí se ventila. No se trata de un "consejo" ni de una "recomendación", sino de una "obligación imperiosa".
Y se dice que es "nuevo", probablemente, en un eco de lo que los propios discípulos percibieron como "novedad" en el modo de vivir del Maestro, en la gratuidad e incondicionalidad de su amor.
Ese aspecto queda subrayado en el mismo término usado. De las tres palabras con las que podía nombrarse el amor en griego, no se elige "eros", ni "filia" (amistad), sino "agápe" (amor gratuito).
Como supo expresar admirablemente Pablo, es el amor, y no los milagros ni las obras más abnegadas, la única señal de los cristianos:
"Aunque hablara las lenguas de los hombres y de los ángeles, si no tengo amor, soy como campana que suena o címbalo que retiñe. Y aunque tuviera el don de hablar de Dios y conociera todo los misterios y toda la ciencia; y aunque mi fe fuese tan grande como para trasladar montañas, si no tengo amor, nada soy. Y aunque repartiera todos mis bienes a los pobres y entregara mi cuerpo a las llamas, si no tengo amor, de nada me sirve" (Primera Carta a los Corintios 13,1-3).
Porque ser discípulo, según el cuarto evangelio, no es el que únicamente "escucha", sino el que ha optado y vive como el Maestro: eso es seguirlo. Es, por tanto, un servidor (13,15-17), que correrá la misma suerte que el maestro (12,26) y que, permaneciendo en la Unidad reconocida (15,1-4), dará mucho fruto (15,8).
De ese modo, el mandato del amor –no podía ser de otro modo- remite a la Fuente que lo posibilita, al Amor originante que entreteje la Unidad que Es y Somos. En la medida en que comprendamos –y nos dejemos sentir- esa Unidad, trascenderemos las rígidas fronteras del ego, accederemos a un nivel transpersonal de conciencia y el Amor podrá fluir.
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